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No es fácil poder vivir del fútbol siendo mujer y, aunque sin separarse de este deporte que tanto le apasiona, la ex portera valenciana pone en marcha un nuevo camino fijado en un objetivo muy distinto.
Gema nació en Valencia el 18 de enero de 1994. Desde pequeña le ha apasionado el deporte y practicó algunos como patinaje, gimnasia rítmica o atletismo.
Comenzó a jugar a fútbol con 12 años en el equipo de su barrio, en el Discóbolo A.C, por la insistencia de unos amigos suyos: “Simplemente me dejé llevar, y me sentí muy cómoda”.
En la temporada 2009 empezó a jugar en el Valencia CF Féminas B, y en 2011 subió al A. En este momento fue cuando Gema se dio cuenta que no era solo un deporte más, como cualquier otro de los que había practicado.
Cuando me convocó la Selección Valenciana y fiché por el VCFF fue impactante», rememora.
«Tanto que no fui consciente hasta que comencé los entrenamientos en el primer equipo. Solo quería seguir creciendo y disfrutando. No lo hubiera imaginado nunca”, añade.
Una fase de aprendizaje en la que conoció a una compañera de portería que le marcó, Guillit, quien le enseñó mucho de lo que sabe.
Nuevas experiencias
En junio de 2016 se despidió del mundo del deporte de élite “con mucha pena por cerrar una época preciosa, pero feliz por empezar una nueva etapa”.
Y es que Gema decidió cambiar de aires y vivir nuevas experiencias. La joven deportista se ha metido de lleno en su carrera, Conservación y Restauración de Bienes Culturales en la Universidad Politécnica de Valencia, algo que difiere mucho de su anterior hobby.
Creo que de vez en cuando es bueno cambiar, hacer cosas diferentes en un momento distinto. Además, ahora tengo más tiempo para mi familia y mis amigos”.
Pero no olvidará todos los momentos que ha vivido gracias a este deporte, y con especial cariño rememora el día que fue convocada para la Selección Española Sub 16: “Recuerdo el momento entrenando en El Planter. Mi padre ya lo sabía porque Pedro Malabia se lo había comunicado, igual que todas mis compañeras».
Fui la última en enterarme, y fue uno de los mejores regalos que me llevo de esta época”.
Aunque por el momento no entra en sus planes volver al campo, o “al menos no como jugadora”, ya que Gema tiene planeado sacarse el N1 de entrenadora para poder abrirse más puertas sin separarse de su pasión. Algo que, por el simple hecho de ser mujer, parece más complicado.
Fútbol y mujer
“Poco a poco se está reconociendo nuestro papel en el fútbol. Hay muchos países en los que se puede vivir de esto siendo mujer, y España avanza a pasos agigantados”.
Darle más visibilidad al sexo femenino sería un buen camino por el que comenzar: “No para hacernos superiores, sino iguales. Pero ya no solo en el deporte sino en muchos aspectos de la vida que, por desgracia, tenemos que seguir progresando”.
Actualmente continúa existiendo cierta discriminación hacia las mujeres en deportes que siempre han sido “de hombres”, y Gema es consciente de que cambiar la mentalidad de todo el mundo es algo muy complicado.
Simplemente a quien crítica que la mujer practique este deporte me encantaría que acudiera a ver un partido de 1a División Femenina, y opinase si estamos o no capacitadas para jugar”.
La portera es sincera, y admite que a pesar de todos los buenos momentos que ha vivido no se ve con un balón en los pies en un futuro.
Mi sueño sería ser profesora de universidad y poder transmitir todo lo que sé a mis alumnos, así como aprender de ellos también. Creo que no es fácil, pero quiero intentarlo”.
Sea en el ámbito que sea, Gema tiene claro lo que quiere y cuando se lo propone lo consigue. Una nueva etapa en su vida que acoge con muchas ganas y que, seguro, le traerá muchos éxitos.
