Adrián Rubio
Conoce la historia de Miguel Morales Moreno, jienense afincado en Valencia desde hace más de 20 años cuyo amor por el fútbol americano le ha llevado a dar un paso que casi nadie daría a su edad
Y es que a ver quién es el ‘valiente’ que, con 43 años, decide convertir su pasión de media vida en una realidad con la que convivir todas las semanas. Eso es justamente lo que ha hecho Miguel, conocido como ‘Linares’ por sus compañeros en honor a su lugar de nacimiento, formando parte de los Valencia Giants enfundado en casco y coraza como lo hacían sus ídolos de los Green Bay Packers a los que tanto tiempo ha admirado.
Un ‘yonki’ del ‘football’
Así se define nuestro protagonista, quien hace exactamente dos décadas que descubrió por primera vez un deporte que ahora goza en España de una popularidad desconocida por aquellos tiempos. Y el flechazo fue inmediato, dando pie a una curiosidad que no ha ido más que acrecentándose con el paso del tiempo.
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«Soy un ‘yonki’ del fútbol americano, tengo armarios de cintas en VHS y todos los partidos de NFL y NCAA de los últimos 10 años en discos duros, con lo cual siempre tengo algún partido pendiente para degustar durante todo el año», afirma ‘Linares’.
Los ‘queseros’ Packers son su equipo favorito, y además no hay tantos aficionados en España que puedan presumir de haber seguido de cerca la extinta liga ‘Beefeater’. Él sí, muy pendiente de los equipos valencianos que la disputaban y fantaseando con algún día ser uno de ellos.
Por ti lo dejo todo
En su cabeza llevaba tiempo rondando la idea de probar, de demostrarse a sí mismo y al resto de personas de su confianza que tantos años de bicicleta y ejercicio físico podían abrirle la puerta de un equipo valenciano de ‘football’. Y los escogidos fueron los Valencia Giants, «por su ataque con un equipo de buenos receptores y además una gran defensa».
Así que cortó de raíz con las pruebas regionales y nacionales de mountain bike en las que llevaba participando en los últimos 10 años, y así buscar su huequecito en el mundo del fútbol americano en España. En su mente una idea, la de «vivir la experiencia desde dentro y saber qué es lo que se cuece desde dentro de un equipo».
Y aunque la temporada pasada, una de las mejores en la historia de los de azul y rojo donde alcanzaron semifinales de la LNFA Serie A y fueron los únicos capaces de derrotar a los campeones Firebats, la etapa fue breve, para este curso volvió con energías renovadas y liberado de otros compromisos.
«Solo pude estar con ellos durante dos meses, dado que al tener una empresa propia y tener gente que dependía de mi fue mucha la presión y tuve que dejarlo muy a mi pesar. Fue una decisión muy dura para mí, pero este año ya una vez liberado de tener una empresa propia decidí cumplir mi sueño de jugar al fútbol americano», reconoce ‘Linares’. Lo hace de ‘right tackle’ en la línea ofensiva de los Giants, toda una hazaña para alguien de su edad (43 años) que supera por poco el 1,80 de altura y roza los 100 kilos de peso.
Best of Hard Knocks
En este su primer año completo de novato «ya he cumplido con creces mi objetivos personales. Me he integrado perfectamente en la ofensiva jugando en todos los partidos y yendo de menos a más en la posición de RT». Un éxito forjado en la siempre dura y exigente pretemporada, su ‘Hard Knocks’ particular bajo las órdenes de un ‘head coach’ norteamericano como Jeffrey Roy y compartiendo línea ofensiva con experimentados jugadores como Basurto, Boret, ‘Perra’, Capelo y Tuuli. «Hacen que todo sea más fácil», asegura este ‘valenciano’ de adopción.
Como equipo reconoce que las cosas «no han salido muy bien» hasta la fecha. Se jugarán la permanencia en un playoff a todo o nada contra el segundo clasificado en la Serie B (Murcia Cobras o Pioners de L’Hospitalet), pero «estamos convencidos de que todo acabará satisfactoriamente para el club».
Un futuro ‘gigante’
Para ‘Linares’ no hay nada como «un buen estado de forma física y constancia en el entrenamiento para poder jugar a fútbol americano en España», y una vez se acaben los días de casco y coraza él ya tiene claro dónde estará.
«En lo personal espero estar unos años más dando el callo en el primer equipo y luego dedicarme a ayudar al club, tanto con los Juniors como en cualquier otro cometido dentro del club», anticipa.
Otra muestra más de que un amor por un deporte crece y se fortalece con los años, y sus palabras deberían ser escuchadas con atención porque historias como ésta sirven para hacer más afición.
Que Valencia, teniendo dos equipos en la élite, no tenga un campo en condiciones y en exclusiva para los dos equipos es sangrante».
Tampoco entiende «cómo gente que ha estado jugando o ligada a un equipo no es capaz ni de ir los días de partido a animar», y para finalizar muestra su deseo por ver «una liga fuerte de 10 equipos dividida en dos divisiones y sobre todo que se pueda jugar la Copa del Rey». Palabra de alguien que ha sacrificado mucho por disfrutar cada segundo formando parte de algo que adora.
