Adrián Rubio
La joven jugadora valenciana de 19 años de edad emprende este domingo 14 de agosto un largo viaje al otro lado del charco, hasta Missouri donde afrontará una nueva y exigente experiencia deportiva y académica que le ha facilitado su excelente rendimiento sobre el campo y en las aulas
Desde la próxima semana será Lindenwood University el nuevo hogar de Teresa, cuya grave lesión en la rodilla que se produjo jugando con la selección española de rugby Seven la dejó fuera de los Juegos Olímpicos de Río 2016 y le hizo replantearse su futuro. Ya va por los 2 meses de recuperación y según asegura ella, «me encuentro muy bien», pero hasta alcanzar los 7 meses que requiere volver al nivel apto de competición aún le queda un largo camino. Ahora lo recorrerá junto a excelentes recuperadores norteamericanos, y en unas instalaciones de primer nivel.
La decisión
El nombre de Teresa Bueso, de apenas 19 años, lleva años siendo recurrente cuando se trataba de analizar a las mejores promesas del deporte en la Comunidad Valenciana y España. A nivel de cantera en el CAU, su familia deportiva, ha ido quemando etapas con éxito y a una velocidad asombrosa, convirtiéndose desde hace algunas temporadas en pieza importante del conjunto femenino rojinegro que ha buscado el ascenso a la máxima categoría además de jugadora habitual de la selección española absoluta de Seven.
La misma que, contando con Teresa en sus filas, completó una grandísima temporada con la histórica clasificación para los Juegos de Río 2016, esos que Teresa ha seguido desde casa por culpa de una desafortunada y grave lesión que se produjo sobre el césped. Un momento que ha sido clave en su vida, y que también le ha empujado a buscar nuevos retos en el rugby y en los estudios.
«Gracias a mi expediente académico, buen nivel deportivo y alto nivel de inglés, y mediante una empresa que me facilitó todos los tramites y gestión, obtuve varias propuestas de diferentes universidades en Estados Unidos. Esta empresa me ayudó a valorar las diferentes ofertas, ya que buscábamos que además de la parte académica tuviese un alto nivel de rugby para poder seguir creciendo como jugadora», explica la valenciana, que «en un primer momento dudé mucho, ya que mi aspiración y deseo siempre había sido la selección, pero mi lesión fue el detonante que me hizo decidirme».
La elegida tras el exhaustivo proceso de selección fue la de Lindenwood en el estado de Missouri, superando a otras mucho más conocidas en el resto del mundo como pueden ser las de Notre Dame o Washington University.
Sport Management
Teresa piensa en deporte pero sobre todo en acabar de formarse académicamente. Para ello ha estado muchos años sacrificándose en España, combinando deporte de élite con unos estudios donde también ha ofrecido excelentes resultados. Gracias a ello no solo se marcha a USA con beca deportiva para jugar al rugby, sino que además hay parte de beca académica que todavía facilita más su traslado a tierras estadounidenses.
Por el momento no se atreve a decir cuántos años va a estar allí estudiando ‘Sport Management’, pero sí está segura de que es la mejor decisión que podía tomar en estos momentos donde la lesión le ha exigido mucha fortaleza psicológica. «No conozco ningún caso similar en rugby, sí en otros deportes. Está creciendo mucho en ese país y sin duda que ha sido un incentivo para encontrar la beca, pero además ha habido que cumplir distintos requisitos de idioma así como algún examen que otro», añade Teresa.
Nos apunta que como es lógico la familia está triste por su partida, pero que a la vez «quieren lo mejor para mí y piensan que en este momento, con la posibilidad que se me ofrece de rehabilitar, seguir creciendo como jugadora y compaginar estudios universitarios es lo mejor que me puedo encontrar».
Mensaje para sus ex y para las heroínas del Seven
Teresa, como es lógico, va a dejar atrás entrenadores, amigas y compañeras que durante los últimos años han compartido con ella grandes momentos dentro y fuera del terreno de juego. Inolvidables sus éxitos vistiendo los colores del CAU Valencia, conjunto con el que ha dominado en la Comunidad Valenciana y que en los últimos cursos incluso ha estado cerca de poder ascender a la élite del rugby femenino en España.
«Me acordaré mucho de ellas, les debo todo y estoy segura de que llegarán muy lejos», afirma Teresa con una confianza ciega en el equipo, y sus palabras no pierden fuerza cuando se le pregunta por su otro equipo, el de España de Seven.
En esta modalidad ha sido subcampeona de Europa sub 18, y tras un año duro codo con codo con ellas en la absoluta sabe lo importante que para sus compañeras ha sido poder el representar al rugby femenino español en los Juegos Olímpicos de Río 2016.
Sé lo que cuesta estar ahí, han conseguido diploma olímpico y es un logro muy importante. Ha sido un orgullo verlas jugar y hubiese deseado con todas mis fuerzas estar con ellas», concluye la valenciana.
Un claro ejemplo de un gran talento valenciano que, con mucha dedicación y esfuerzo, es capaz de alcanzar grandes cotas. La última, poder disfrutar de una histórica oportunidad en un país donde el deporte universitario se escribe con mayúsculas. El nuevo hogar de Teresa Bueso, una de las grandes ‘joyas’ del rugby valenciano y español dispuesta a contribuir al crecimiento de esta disciplina al otro lado del charco. ¡Mucha suerte!
