Hassane Ahouchar, la historia de un superviviente del atletismo y de la vida

Hassane Ahouchar, de 41 años, es un atleta reconocido a nivel nacional e internacional. Los trofeos se agolpan en los estantes de su casa ya que carrera que corre, carrera que gana. En cada uno de ellos está escrito con sudor y esfuerzo parte de su historia de supervivencia y lucha infatigable.

Marroquí de nacionalidad, Hassane conforma uno de los miles de extranjeros que se han jugado la vida por labrarse un porvenir. El 14 de enero de 2005, fecha que se quedará grabada a fuego por siempre en su memoria, Hassane pagó 1.000 euros por un billete en una frágil patera que tantas muertes se cobra año tras año. Afortunadamenta para él y para los amantes del atletismo, Hassane desembarcó en Valencia con su un saco repleto de sueños donde destacaba por encima de todas las cosas el dedicarse a correr porque “yo he nacido para ello”.

Inicios atletismo

Aunque ya hace once años que Hassane se despidió de su Marruecos, a la que sólo vuelve en verano para saludar a la familia, a ella le debe su incursión en el atletismo. Sí, la misma de la que tuvo que irse por querer un futuro mejor. Marruecos erige para Hassane su Yin y su Yang.

Cuando Hassane tenía 19 años, decidió participar en una pequeña carrera organizada en su pueblo. Después de haber jugado un partido de fútbol, Hassane ganó con facilidad la carrera y se dio cuenta por primera vez que quería convertir el atletismo en su estilo de vida. Dicha revelación motivó que Hassane se apuntara en el modesto club de atletismo de su pueblo y empezara a correr de verdad.

Llegada a España y Club Es Posible

“Tuve que venir a España a ganarme la vida, como todos. No tenía idea de venir pero un amigo mío me dijo que probara, que había posibilidades para venirnos los dos. Y le dije que si todo era seguro de acuerdo”, relata Hassane.

Aunque Hassane llegó a Valencia en enero del 2005, hasta septiembre no consiguió regularizar los papeles. A pesar de la tardanza, Ahouchar asegura que “tuve suerte porque no tardaron mucho en hacer los papeles como les pasa a otros”.

A los tres meses de estar en Valencia, Hassane conoció un amigo que era miembro del Club Es Posible. Él fue quien le animó a correr la Volta a Peu y el culpable también de que Hassane accediera después de la carrera a formar parte del club.

“Empecé a entrenar y a hacer pruebas. Lo combinaba todo con un trabajo que conseguí en la playa”, explica Hassane.

Club Cárnicas Serrano

Hasta 2008 Hassane se dedicó en exclusiva al Circuito Diputación, donde ganaba absolutamente todas las pruebas. Ello provocó su fichaje por Cárnicas Serrano, donde estaría hasta 2013. Durante dicho periodo de tiempo, Hassane empezó a correr muchas más carreras por toda España e incluso fuera como en Marruecos o China, entre otros.

Asimismo consiguió un trabajo en una de las fábricas de la marca, que como el propio Hassane reconoce “no podía entrenar todo lo que quería y para hacer marcas uno ha de centrarse sólo en las carreras”.

Pero la buena dicha laboral no duró mucho, y en 2010 Hassane se queda en paro, donde todavía sigue. Dicha difícil situación lo aboca a multiplicar el número las carreras para conseguir los diferentes premios metálicos y así sustentar a su mujer y dos hijos.

En 2013 dejaría de formar parte del club por no compartir determinados aspectos con los dirigentes.

Club de Atletismo Apol.ana

Tras Cárnicas Serrano, Hassane militó durante tres años (2013-2016) en el Club de Atletismo Apol.ana de Alicante. Durante su etapa con el club alicantino logró alcanzar la cota que cualquier atleta anhela: participar en unos Juegos Olímpicos.

Hassane fue seleccionado por Marruecos para participar en Río, sin embargo el destino le tenía guardado un duro sinsabor. Corriendo la Media Maratón de Albacete, Ahouchar se lesionó del isquio y del tendón detrás de la rodilla y tuvo que renunciar a los JJOO de Río de Janeiro.

Aconsejado por un amigo, comenzó su recuperación en la Clínica valenciana Sportphysiology de la mano del fisioterapeuta Aurelio Martínez. “Pensaba que en un par de semanas estaría recuperado de la lesión, pero se alargó dos meses largos”, indica Hassane.

Club GAES Valencia

Hassane se ha incorporado recientemente al nuevo club valenciano: GAES.

Últimos logros

Los últimos hitos conseguidos por Hassane ha sido alzarse vencedor del XXIX Pas Ras al Port de Valencia y su meritorio sexto puesto en el Maratón de Valencia 2016 sólo por detrás de los atletas “Nike y Adidas”. Y es que aunque Hassane por sus marcas sea considerado un atleta de élite no dispone de los patrocinadores que estos atletas sí poseen.

Próximas metas

Toca dejar el pasado atrás y pensar en la siguiente carrera: la XXXIII San Silvestre Popular Valenciana del próximo 30 de diciembre. Y es que como se ha mencionado con anterioridad, los premios metálicos de las carreras que Hassane disputa son el único sustento para su familia: su mujer y sus dos hijos.

Una sobrecarga de carreras que es peligrosa y que aumenta las probabilidades de padecer lesiones, como le ocurrió en la Media Maratón de Albacete y que truncó su sueño de participar en los JJOO de Río.

Luchador incansable

“Sigo corriendo y luchando y así va a ser siempre para conseguir lo que quiero. Siempre intento buscar patrocinadores, porque en algunas carreras me ayudan económicamente pero en otras pago de mi bolsillo”, subraya Hassane.

A pesar de la gran cantidad de carreras que existen Hassane advierte que deberían aumentar,  pero sobre todo mejorar los premios metálicos otorgados. “Todo es culpa de la crisis, si no todo sería mucho mejor”, agrega Hassane.

El mundo del atletismo es harto complicado, como así lo reconoce el propio protagonista, sin embargo reconoce que “todo el mundo quiere este mundo. Si pides ayudar a gente pueden echarte una mano, eso pasó conmigo y afortunadamente estoy aquí”.

A Hassane le gusta comparar el atletismo con la vida misma.

“Cuando sientes que no eres capaz de algo, que tienes momentos de bajón, no tienes que bajar las manos. Hay que ser fuertes y tirar hacia delante”, incide Hassane.

Apoyo familiar

Su mujer es una pieza clave en la historia, ya que Hassane entrena muchas horas a la semana y el peso de la casa y de los niños recae en ella. “Si no fuera por mi mujer no podría dedicarme a esto”, resalta Hassane. Su familia es una más de todos aquellos que animan a Hassane en las carreras.

“El ánimo del público es muy importante para mí, me conocen bastante y durante todo el recorrido oigo Ahouchar, Ahouchar. Es un plus para mí además de mi familia. Mi hijo pequeño, Aymen se vuelve como un loco”, apostilla Hassane.

La edad

“Ya he hecho historia. Soy muy conocido en España e incluso en partes del mundo, lo que no es nada fácil. Nunca he pensado en dejarlo, ni siquiera cuando me recuerdan que tengo 41 años. Uno se cansa, es cierto, pero has de estar fuerte mentalmente. Y yo lo soy”, concluye Hassane.