Samuel Borja
Como demuestran los datos recientes, los espectadores, aficionados y jugadores de toda Europa han aumentado considerablemente su interés por este deporte.
La hegemonía del fútbol sigue reinando en gran parte de Europa y del mundo, pero si centramos nuestra mirada en el deporte de la canasta, este parece estar viviendo un momento de repunte en toda Europa, y con importantes signos de mejora en las categorías llamadas «FEB» en España.
El Buesa Arena de Vitoria lleno durante la Copa del Rey 2017
Esto lo demuestran distintos datos que ha recogido la Euroliga y las estadísticas de asistencia a diversos pabellones que han aumentado considerablemente. Tras el cambio de formato en este curos 2016-17 nos encontramos con que la asistencia a los pabellones hasta finales de 2016 ha aumentado un 28% respecto al mismo periodo del año anterior. En España, la Copa del Rey volvió a poner en boca de todos este deporte a nivel nacional, a lo que lo sigue la lucha de dos equipos nacionales en la final de la Eurocup y el liderato del Real Madrid en el nuevo formato de Euroliga.
En Valencia, el pabellón de la Fuente de San Luís se queda pequeño con 8.500 localidades para albergar los partidos importantes y roza el lleno en casi todos los encuentros de liga. En categorías inferiores se ha dado un repunte en asistencia y en seguimiento de los equipos. Y ¿Por qué se da todo esto? Nosotros hemos dado con siete razones fundamentales:
1- Más calidad
Es innegable que con el paso del tiempo los jugadores europeos dan el salto con mayor frecuencia y en mayor número a la NBA, e incluso algunos de ellos están entre los mejores de la liga norteamericana. Esto demuestra que el nivel en Europa, siendo todavía inferior, no dista tanto del americano como antaño.
Es más, muchos jugadores optan tras su paso por la NBA por regresar a Europa, donde aumentan el nivel de los equipos y esto, en definitiva, aumenta el nivel del espectáculo. Canastas imposibles, jugadas de ensueño, mates contundentes… que hasta hace poco solo se podían ver asiduamente por televisión.
2- Más puntos
Partido de LEB Oro con gran asistencia de público en el debri gallego
Tras el inicio de la nueva Euroliga los equipos anotan de media entre los dos más de 10 puntos por partido que el año pasado. El nuevo formato con estilo de liga a ida y vuelta ha soltado más a los equipos, que no viven tan pendientes del ganar o caer eliminado y ha invitado a un juego más alegre y vistoso.
Pero no solo en Europa. A nivel nacional las competiciones LEB Oro y LEB Plata han subido también el promedio de puntos por partido en los últimos cuatro años. En LEB Oro de 73,9 a 77,4, y en LEB Plata de 71,6 a 74,3 hasta mediados de la actual temporada. Los números indican un mayor acierto y por tanto una mejora en el rendimiento de jugadores y equipos.
3- Más competitividad
Tanto la Euroliga como la Liga Endesa están este año súmamente igualadas. Y son a priori, las dos mejores competiciones del viejo continente. El Real Madrid, alzó el título de Copa del Rey, pero ganando por tan solo dos puntos al Valencia Basket, un equipo que no está en Euroliga y que le jugó de tu a tu al conjunto blanco, y antes, al inicio del curos, fuel el Herbalife Gran Canaria el que levantó la Supercopa, superando a los tres Españoles de Euroliga.
Además, los datos que ofreció la Euroliga a finales de 2016 hablan de que un 25% de los primeros 80 encuentros se deicideron por menos de tres puntos. Un incremente notable respecto al 10% de la campaña anterior. La diferencia se estrecha y la emoción crece.
4- Mejores formatos de competición
Stoudemire, toda una leyenda de la NBA. Fue elegido dentro del 2o mejor quinteto de Eurocup.
Pudo ser el anuncio de la FIBA de la creación de la Champions del Baloncesto lo que desencadenó todo. Pero el caso es que la reacción de la Euroliga para no perder espacio fue la creación de esta nueva y polémica «liga europea». También se vio obligada a modificar el formato de la Eurocup, la segunda competición, por falta de equipos, que ha pasado a tener un playoff más largo y que está resultando atractivo. Parece que los cambios han funcionado para bien.
Estos formatos europeos pueden disminuir la importancia de las ligas nacionales, que deberán adaptarse a las circuntancias para aprovecharlas y no perder terreno, como la posible supresión del Playoff de la Liga Endesa que se viene rumoreando de cara a futuras temporadas. Pero lo cierto es que al galardonado formato de la Copa, también le acompañan nuevos grupos de EBA, con mayor emoción, proximidad y unas Final Four por el ascenso repartidas por España que han dado vistosidad a esta sacrificada categoría.
5- Mejora económica
Tras el batacazo de muchos clubes por la crisis económica, parece que en los últimos años vuelven a aparecer apoyos, aunque todavía tímidos, a los equipos de baloncesto. En el caso de la Comunidad Valenciana, el propio Fernando Roig ha patrocinado mediante la marca TAU cerámica al Amics de Castelló de LEB Oro. Alicante vuelve a ver resurgir a su HLA Lucentum y Gandia apostó desde el consistorio por respaldar el ascenso deportivo de su Hispagan UPB Gandia a LEB Plata.
Falta por ver la viabilidad de los equipos que quieren aparecer en escena en la ACB o que se mantienen a duras penas en la primera categoría del baloncesto español. En esos casos todavía causa estragos la falta de esponsorización.
6- Mejores gestiones deportivas
Probablemente por los sustos y desgracias que ha traído la crisis tras las vacas gordas, ahora pocos apuestan por los grandes dispendios y los fichajes rutilantes en categorías inferiores. Todos prefieren actuar con cabeza y dar una viabilidad económica segura a sus proyectos. Siempre hay excepciones, pero en general los excesos pasaron a mejor vida.
7- Mejores departamentos y canales de comunicación
Puesta de largo del acuerdo de Liga Endesa con Movistar para los derechos televisivos
Tras un desprecio generalizado a los departamentos de prensa y/o comunicación, y cuando en la cuna del baloncesto de élite como es EE.UU. ya habían realizado ingentes esfuerzos por dar a conocer su producto y posicionarlo, apareció en Europa y después en España, y ahora empieza a llegar a los clubes de base, la concienciación de que aquello que no se cuenta es como si no sucediese en esta era de la información.
Las propias competiciones y los clubes de diferentes rangos, en mayor o menor medida, y dentro de sus posibilidades, han empezado a destinar parte del presupuesto a cuidar su departamento de comunicación e imagen. Un paso hacia delante que también supone una de las razones por las cuales los aficionados están más al tanto de lo que sucede en los equipos y nuevos espectadores se suben al carro del baloncesto.
