Adrián Rubio
El Amateur masculino, líder en su grupo de 1ª Regional, puede volver a competir tras muchos meses de parón junto al resto de equipos y categorías que por fin regresan a la acción, pero sigue inmerso en un importante contratiempo para entrenar en su casa.
Ya os hablamos de su situación, que no es única en la Comunitat Valenciana en estos extraños y complejos tiempos de pandemia de COVID-19, el pasado mes de enero.
Entonces tenían que buscarse la vida por las calles de su pueblo, Alaquàs, y de la vecina localidad de Torrent para poder hacer frente al trabajo semanal sin verse asfixiados por el toque de queda impuesto a las 22:00 horas.
El calvario por las calles para poder entrenar del líder UE Alaquàs i Walter
Por el reparto de horas que realiza el ayuntamiento de Alaquàs, esta temporada al líder de su grupo en 1ª Regional le toca el último turno, el de las 21:00 horas. Y dado que hay que acabar poco después de las 21:30 si no se quiere incumplir la normativa ya que algunos de sus integrantes vienen desde València, se ven incapacitados para realizar sobre el césped del Poliesportiu El Terç una sesión completa y de calidad que tanto necesitan.
Colaboración vecinal
Ante la falta de soluciones ofrecidas por el consistorio, que tampoco les facilita un permiso para que en caso de volver algún chaval más allá de las 22:00 horas no se meta en problemas con las autoridades, desde el UE Alaquàs i Walter FC no les ha quedado más remedio en los últimos meses que hacer suyas las calles o jardines de la ‘contorná’ para empezar con el trabajo físico a partir de las 20:00 horas.
Estamos un poco desmotivados, pero también es cierto que los chavales siguen comprometidos y en los últimos entrenamientos en Torrent hemos tenido hasta 19 chicos”
De esta forma, pueden entrenar y luego llegar a sus domicilios a tiempo, aunque las condiciones para sus ejercicios no sean las ideales.
“Estamos un poco desmotivados, pero también es cierto que los chavales siguen comprometidos y en los últimos entrenamientos en Torrent hemos tenido hasta 19 chicos”, nos cuenta Jordi del Campo, el entrenador con el que ya hablamos en enero.
Son tiempos de lamentar que los jugadores tengan que sufrir las consecuencias de no ser ubicados en alguna otra franja más temprana en el Terç, cuando además nos dicen que por este curso de pandemia hay más huecos antes de las 21:00 que en temporadas previas.
Pero mientras ellos no pueden entrenar en el campo de su municipio, aparecen benditos y necesarios colaboradores como el Evangélico CF, de Torrent, que han acogido al decano de Alaquàs para compartir campo de césped artificial a una hora que les permite poder hacer físico, y ejercicios con balón, sin agobios por el toque de queda fijado a las 22:00 horas.
Los chavales tienen claro que no se van a bajar del barco, que quieren acabar y competir esta temporada pase lo que pase”
Cuando era a las 23:00 aún podían lidiar con el entrene a las 21:00 en el Terç, pero desde enero todo esto ha sido imposible y aún a día de hoy, a punto de regresar a una competición en 1ª Regional que lideran, siguen estancados y sin una mano tendida por parte de las autoridades políticas.
“Los chavales tienen claro que no se van a bajar del barco, que quieren acabar y competir esta temporada pase lo que pase”, resalta un orgulloso técnico, para el que la desescalada deportiva no será completa hasta que puedan desenvolverse en su propio entorno y a una hora adecuada para ellos.
