Una nueva Esperanza para Silla

Lo tuvo para el Amateur Femenino del UD Esperanza, el histórico club de Silla con casi 30 años de vida que pese a las dificultades se mantiene en competición con 3 equipos: Amateur y Juvenil Masculino, además del ya mencionado Femenino.

Un punto dos años y casi 300 goles en contra después

Para entender y contextualizar la alegría y celebración de las jugadoras y entrenador del equipo femenino del UD Esperanza tras el 0-0 del pasado fin de semana, que no les saca del fondo de la clasificación en una temporada donde las derrotas vuelven a ser el denominador común, hay que saber de dónde vienen, contra qué luchan y por qué siguen adelante.

El rival no era otro que el Silla CF, el vecino poderoso y con multitud de equipos y chavales en su estructura, la gran amenaza para la supervivencia de una UD Esperanza que desea encontrar el necesario respaldo institucional desde el consistorio para ir ganando terreno en la localidad.

Con solo 1 gol a favor y 34 en contra, habiendo perdido en cada una de las 11 fechas disputadas, el inicio del 2018 no tenía por qué ser diferente para los rivales del equipo entrenado por Adrián Coronado. Pero algo esta cambiando en el club, la chispa lleva tiempo encendida y ya va prendiendo en el seno de una entidad que desea resurgir, a lomos del ejemplo de superación y esfuerzo que ofrecen sus futbolistas.

El ‘juguete roto’ va dejando de serlo, y un clásico en las derrotas y goleadas en contra que se ha instaurado en el potente grupo de Valencia central tras iniciarse hace algunas temporadas en el de la Ribera, siente que el nuevo año puede ofrecer más cosas positivas que negativas. “Las chicas notan una mejoría, que compiten contra casi todos los rivales”.

“Contra ellas podías probar cosas siendo rival, ahora ya nos miran de otra manera y saben que no va ser tan sencillo como en el pasado”, añade Adrián Coronado, el hombre que junto a la presidenta Neus Pérez ha inspirado el cambio de mentalidad y cultura en la UD Esperanza desde que aterrizó a finales del curso pasado.

Las chicas están ilusionadas y el proyecto es importante, ambicioso”.

Un cambio que también debe llegar en la actitud del entorno

Pero a la excelente labor que tanto directiva como cuerpo técnico y jugadoras de la sección Femenina están realizando debe sumarse, y de forma inmediata, el obligado respaldo del ayuntamiento.

Todos coinciden en reconocer el mayor volumen de jugadores y equipos del Silla CF, pero al mismo tiempo señalan que eso tampoco debe ir en contra del crecimiento y supervivencia de la otra entidad futbolística de la localidad.

Porque en la UD Esperanza tampoco ven con malos ojos lo de tener que jugar fuera del Polideportivo y hacerlo en el viejo Campo de Fútbol de El Port de Silla, pero siempre que desde las instituciones locales cuiden y vigilen que la instalación esté en las correctas condiciones.

Situaciones como las de estar 4 meses sin agua caliente, o tener que ver como el operario que destina el ayuntamiento se tiene que subir a una torre de los focos, destornillador en mano, para evitar que pueda desprenderse parte del desgastado material y poner en peligro a los allí presentes, no son de recibo en los tiempos que corren.

Y ni la UD Esperanza, ni ninguna otra entidad, merece convivir con unas condiciones similares.

“Nos dan el argumento de que el Silla CF, con más de 400 chavales en su estructura, ocupa casi todo el horario y lo que haya libre es lo que nos tenemos que coger nosotros si queremos estar en el polideportivo. No nos queda más remedio, para disfrutar de otros horarios, que ir al campo del Port de Silla”.

Es nuestra casa desde hace unos años y no nos quejamos de eso, pero que al menos la tengan bien cuidada y atendida ya que el UD Esperanza también es de Silla, y merece un respeto y trato que sus 3 equipos no están teniendo hasta la fecha”, insisten desde el club.

Nadie pierde la esperanza

Podemos hacer infinitos juegos de palabras en relación a la palabra ‘esperanza’, pero la realidad es que es a esto a lo que más se aferra la gente del día a día de un club que ve luz al final del túnel. Al borde de la desaparición no hace tanto tiempo, resultados como el 0-0 del pasado fin de semana contra el Silla CF justifican sacrificios diarios.

El de Adrián Coronado, el entrenador. Lo suyo son casi 40 km los lunes, miércoles y viernes para acudir desde su residencia en Moncada hasta Silla y entrenar a las chicas. El de Neus Pérez, la presidenta, al superar la ausencia de José Vicente Juan Rodrigo, histórico directivo que tanto luchó por el bienestar del UD Esperanza y que iba a relevarle este curso en la presidencia, hasta que un accidente de tráfico acabó trágicamente con su vida.

Y por supuesto que hay que mirar al vestuario, a unas jugadoras que mezcla de algunas que ya estaban en el equipo cuando todo eran goleadas en contra, y de otras que han acudido a la llamada del míster, han logrado darle respeto y orgullo a la sección femenina del club.

Son todos ellos los culpables de que en Silla haya una nueva esperanza para aquellos que desean mantener con buena salud a una institución necesaria para la localidad, integradora y necesaria para tantos chicos y chicas que aquí encuentran una salida deportiva.

“Este primer punto en 2 años para la sección femenina del UD Esperanza es la recompensa al esfuerzo, a dar lo mejor de nosotros mismos. El club está cambiando”, remarcan mientras fijan la mirada en el siguiente reto del 2018. La visita al colista, también con 1 punto, CD Monte-Sión.

Un triunfo relanzaría aún más si cabe a una familia deportiva que sonríe, que ve los frutos a su entrega y compromiso y que sobre todo se enorgullece de portar, con respeto y cariño, los colores de una UD Esperanza que desea renacer a partir del 0-0 más importante de su historia.