Crueldad absoluta con un Levante UD FS que rozó el título de la 1ª LNFS hasta en dos ocasiones | Yo soy noticia

La primera parte tuvo todos los ingredientes de una final, especialmente del tercer y definitivo partido que decidía al campeón. En el Palau Blaugrana se vio una primera mitad sin goles, con 0-0 al descanso, aunque no faltó emoción y mucho juego de pizarra en ambos bandos.

Y también ocasiones, no demasiadas pero sí muy claras. Un palo por bando, y acciones tan claras como la que perdonó Roger en el LUD FS tras robo y en el mano a mano con Dídac.

A cada acción de uno de los equipos finalistas llegaba la respuesta rival, como si se pusieran de acuerdo, pero nadie le perdió la cara a la final en un primer acto donde las fuerzas estaban muy igualadas. El Levante UD FS defendía muy arriba, alejando a Ferrao y al Barça de la portería de un Fede que cuando tuvo que intervenir en los primeros 20 minutos, siempre lo hizo con acierto. En realidad, como casi siempre en esta finalísima de la 1ª LNFS.

El Barça tocaba pero no encontraba los caminos despejados hacia Fede, y eso que de vez en cuando se animaba a atacar con Dídac de quinto hombre y fuera de su portería. Pero los de Diego Ríos no han sido una comparsa en esta gran final, y su cuerpo técnico y plantilla demostraban de nuevo en este primer acto del tercer partido que no les atenazaban los nervios del debut en una cita de este calibre. Al joven técnico gallego le funcionaban las rotaciones, y nadie bajaba el nivel del equipo cuando le tocaba actuar.

Fueron Rubi Lemos y Rivillos los que tuvieron las últimas del LUD FS antes del descanso, al que se llegó con los dos conjuntos en 5 faltas y con las espadas en todo lo alto, aunque con la ligera sensación de que los granotas estaban algo más cómodos sobre la pista del Palau. Confiando en su plan, tuteando al todopoderoso Barça en su casa.

Pedro Toro hace soñar al levantinismo

El segundo tiempo comenzó de forma ideal para el Levante UD FS, anotando a los pocos segundos. Volea de Maxi Rescia que repelió Dídac como pudo y rechace que embocó Pedro Toro, el más listo para hacer un 0-1 que hacía campeón al LUD. Primera vez en la final que se adelantaban los valencianos.

A partir de ahí la final cogió una marcha más, con jugadores como Adolfo, Dyego y Ferrao (balón al palo) asumiendo galones en el Barça en busca del empate pero siempre topándose con el muro defensivo levantinista que personifica como nadie el portero Fede. El valenciano volvió a estar impecable, abortando los acercamientos de un Barça que se iba desesperando. Aunque los azulgranas achuchaban, dominaban, algo que intentaba cambiar Diego Ríos con la sorpresa de sacar a Rubi Lemos como quinto hombre en sustitución del portero. Golpes de timón desde el banquillo que de todas formas al LUD no le funcionaban para marcar el segundo tanto en el Palau.

No pudieron los granotas ni cuando el Barça estuvo dos minutos con inferioridad por expulsión de Coelho tras una fea acción sobre Rubi Lemos. Rivillos lo rozó, pero era noche de aguantar el marcador y de fiarlo todo a las piernas en defensa, a la puntería desviada de los locales y sobre todo al gran Fede.

Con el paso de los minutos su figuraba se agigantaba, haciendo mella en los rivales y frustrando a un Barça que no era capaz de empatar en sus múltiples disparos a portería. Pero como el LUD no lo cerraba con el segundo gol la emoción no se desvanecía, hasta con Dídac asustando desde lejos con un disparo que repelió el larguero.

El LUD rozó el título en el tiempo reglamentario, apretando los dientes pero incapaces de frenar el genial pase de Marcenio a Daniel que significó el 1-1 con apenas 44 segundos en el crono y con los culés volcados en el ataque 5 para 4. Un tanto que mandaba el tercer y definitivo choque de la final a la prórroga.

Los penaltis deciden

El LUD acusó el golpe de no haber podido ampliar la renta y sufrir el gol del empate barcelonista a menos de un minuto para el final, pero pocos segundos. Los que quedaban hasta que llegara la prórroga, que los granotas la iniciaron con personalidad y un largo ataque en superioridad 5 para 4 que finalizó Rafa Usín para enmudecer al Palau Blaugrana.

Subía el 1-2 al marcador con el que se llegó al final de la primera parte de la prórroga, no sin antes sufrir el susto de un nuevo palo barcelonista. Fue el segundo para Ferrao, desesperado ante su falta de puntería en la noche de hoy.

Y el drama para los visitantes se volvió a repetir, de nuevo a menos de un minuto del final de la prórroga, cuando ahora Matheus era el que igualaba 2-2 para llevar el último partido de la temporada a los penaltis. Desenlace no apto para cardíacos, con la ventaja psicológica para un LUD que ya ganó así el primer partido de la finalísima 1ª LNFS.

Pero aquí la historia se escribe con el acierto de Daniel para el FCB, y el fallo en su lanzamiento de Esteban Cejudo, deteniendo un Dídac que le dio la 1ª LNFS a los suyos. Esta vez, por desgracia para el LUD y para el futsal valenciano, Fede no fue el héroe, y eso que detuvo una pena máxima y estuvo cerca de sacar otro lanzamiento.

Rozaron el primer título liguero para la ciudad de València, cuyo último éxito seguirá siendo la Copa de España lograda por Vijusa Valencia hace casi 20 años.

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