Carlos Martínez
Conocemos a 'Manolín', el nuevo técnico del Servigroup Peñíscola. El exjugador hará su debut en la élite del fútbol sala nacional después de cosechar diferentes ascensos con equipos de la Comunitat Valenciana.
El verano está a la vuelta de la esquina y es tiempo de planificación, de organización, de revisar los errores y de poner en valor los aciertos. Es tiempo de cambio, sobre todo en el mundo deportivo. Y después de la crisis del coronavirus COVID-19, ver a los equipos de la Comunitat Valenciana preparando la temporada 20/21 en cualquier modalidad deportiva es motivo de alegría. Uno de los últimos en hacerlo ha sido el Servigroup Peñíscola.
El equipo castellonense, que ha terminado en undécima posición en la Primera División de la Liga Nacional de Fútbol Sala (LNFS) con 26 puntos, ha decidido darle una vuelta a su proyecto cambiando a su director de orquesta. Tras dos años dirigiendo el banquillo, Juanlu Alonso se despidió del banquillo de Peñíscola y su sustituto será Manuel Collado, ‘Manolín’, que hará su debut como entrenador en la máxima competición del futsal nacional.
Eso sí, antes de comenzar su andadura en tierras castellonenses, ‘Manolín’ intentará guiar a su CDFS Segorbe hacia la Segunda División B en la fase de ascenso que se celebrará en el mes de julio. Dos proyectos en un entrenador que sigue su proceso de formación y crecimiento y que hoy se sincera en YoSoyNoticia.es.
Soy una persona comprometida y voy a estar en la fase de ascenso
La crisis generada por el COVID-19 ha hecho que algunos equipos ya estén pensando en la próxima temporada y que otros todavía luchen por sus sueños. Ahora mismo, ‘Manolín’ está inmerso en las dos situaciones. Y es que su fichaje por Peñíscola no hace que deje en la estocada a Segorbe: «Tenemos la fase de ascenso y en julio la jugaremos. Vamos a pasar las pruebas del COVID-19 para saber si podemos empezar a entrenar y la semana que viene ya volveremos a hacerlo si todo va bien. Pero voy a estar, claro. Soy una persona comprometida y estoy ahora trabajando en los dos sitios«.
Un parón, incertidumbre y cambios de formato para acabar jugando una fase de ascenso a un partido. Sin duda, una situación complicada de gestionar: «Es complicado preparar todo por la incertidumbre que se genera sobre las fechas, las condiciones, las posibilidades de entrenar… Nos tenemos que adaptar y ser flexibles. Hay que aceptar la situación con la máxima tranquilidad posible y hemos estado pendientes de que los chicos tuvieran trabajo con los preparadores físicos y que no les afectara demasiado la inactividad sabiendo que podríamos jugar el playoff».
Lo que está claro es que ‘Manolín’ sí sabe adaptarse a cualquier situación. Meses de parón, una fase de ascenso diferente y un fichaje no le impiden llegar a todo: «Hay que intentar organizarse durante el día y saber que el día es muy largo y que hay tiempo para dedicarlo a los dos proyectos con total normalidad y exclusividad. Todos los proyectos requieren su tiempo e intento estar pendiente. Lo estoy llevando bien y espero que me dé tiempo a llegar a todo de la manera en la que quiero».
Hay un alto nivel de exigencia y vamos a trabajar desde el primer día
Una vez se supere esa fase de ascenso, la vida profesional de ‘Manolín’ se dedicará única y exclusivamente al Servigroup Peñíscola. Llega con ambición para estrenarse como entrenador en lo más alto, pero con las ideas claras: «Soy consciente de la exigencia que tiene la Primera División porque la he vivido como jugador. Tenemos que trabajar muchísimo desde el primer día intentando construir un equipo con unos valores. A partir de ahí, que los chicos estén convencidos de nuestro modelo de juego para ser competitivos en cualquier pista y ante cualquier rival».
Pero su debut como técnico en la élite no le genera nervios. Todo se ha convertido en un reto: «Tengo mucha ilusión y estoy muy agradecido por la confianza que me han mostrado desde el primer día. Pero también sé que la ilusión y el agradecimiento traen consigo una responsabilidad. Tengo nuevos retos y una competición que me van a exigir mucho trabajo a nivel individual y colectivo para estar bien en la liga. Voy a dejarme el alma por el equipo y ya la liga nos dirá dónde estaremos».
Además, parece que el destino ha querido unir a un entrenador en plena proyección con un equipo que se reinventa cada año: «Esa ha sido una de las premisas que hemos seguimos ambas partes. Compartimos una serie de valores. Peñíscola es un equipo que viene de hacer cosas increíbles con pocos recursos. Es un club que está todos los años sacando jugadores y sigue al pie del cañón. Tiene mucha ilusión por trabajar y es un equipo muy profesional. Creo que en eso compartimos muchas cosas».
Se está trabajando bien y vamos por buen camino
En el plano más deportivo, ‘Manolín’ también tiene claro cómo quiere que sea su equipo en su nuevo proyecto: «Me gustaría ser un equipo incómodo, que marca un ritmo alto para los rivales, que es compacto, unido y que está junto. Un equipo que sea capaz de sufrir y divertirse a la vez en una liga tan exigente como es la Primera División».
Lo que está claro es que con equipos en Primera División como el Levante o el propio Servigroup Peñíscola y con conjuntos asentados en Segunda e incluso luchando por ascender a Segunda B y Tercera, el fútbol sala de la Comunitat Valenciana está en un buen momento de forma: «Hay muchos equipos a un muy buen nivel. La salud del futsal valenciano es muy buena, aunque ojalá tuviéramos a más equipos en Primera. Pero vamos por buen camino y estamos trabajando bien».
Fotografías: Servigroup Peñíscola.
