Eva Gadea y los años infinitos de juventud | Yo soy noticia

El deporte exige tanto física y mentalmente que va desgastando con el paso de los años. Pero existe un caso en concreto que no sigue esta tendencia. Es mas, decide darle la vuelta y destacar por encima de todos. Hablamos de Eva Gadea (València, 50 años). En septiembre cumplió los 50 años y acaba de batir el récord del mundo master W50 de triple salto con una marca de 10,95. Tiene años infinitos de juventud.

En la vida de un deportista de élite pocas horas hay libres al día. Pero Eva coge el teléfono a YoSoyNoticia justo en (casi) el único momento de la semana de descanso: «Los lunes por la tarde es el día que descanso porque es el inicio de la semana y tengo que hacerme hueco entre el trabajo, mis hijos…«. Aun así, la atleta valenciana explica que tras batir el récord del mundo el sábado no se tomó el día siguiente de descanso. Y todavía sigue incrédula por lo conseguido: «aún no me lo creo«.

El récord que batió el pasado sábado no es uno más. Es el más alto del mundo. El de más categoría. La atleta valenciana mejoró en dieciséis centímetros la anterior plusmarca, que estaba en poder de la ucraniana Valentyna Krepkina (10,79) desde 2017. Además, elevó el récord nacional 33 centímetros, ya que el anterior, de 2009, era de Rosa Escribano con 10,62. Ese mismo día, el sábado, igualó también el récord de España de longitud de Loles Vives con 5,57. «Esta vez sí que sabía en qué marca estaba el récord», comenta Eva.

De menos a más

Eva Gadea salta a contracorriente en su progresión diaria. Cuantos más años cumple, más récords bate. Cambiando la tendencia total y absoluta del desarrollo físico del cuerpo humano. «Al cambiar de categoría el estado físico de las mujeres y de los hombres va aminorando, pero yo de momento voy a más«. Y añade: «Ya son muchos los que me han dicho: “Eva tú este año prepárate porque irás a menos» Y yo cada año voy a más. Me lo dice gente que lo ha vivido… pero yo de momento me veo con mucha fuerza. Yo tengo el cuerpo muy preparado. Y creo que no me ha costado mucho este récord, aunque intentar acercarme a 12 metros sí que pica un poco más…».

Eva Gadea: «Cada año voy a más. Me veo con mucha fuerza»

Conseguir el récord mundial en triple salto es algo que Eva hace una década nunca hubiera imaginado: «Si me dices hace diez años que voy a batir el récord del mundo en tripe salto, me río. Hace diez años estaba aún criando a mis hijos. Pero hace ocho años cuando empecé esta segunda etapa tampoco me lo hubiera creído». De hecho, matizando en la importancia de la marca conseguida, añade incrédula: «Aún no me lo creo… que no haya ninguna mujer en el mundo que no me supere… ¡soy la mejor del mundo en triple salto!«.

La ambición de la atleta valenciana del CA Silla no se detiene tras haber conseguido esta marca mundial. De hecho, este fin se semana se disputa el Campeonato de España por equipos, en el que Eva competirá con el Catarroja al ser filial del CA Silla, donde tiene la ficha federativa. Se congregan los ocho mejores conjuntos del país. Y, claro, Eva también tiene la oportunidad de volver a mejorar distintas marcas. «El objetivo es acercarme a 12 metros… sé que lo puedo conseguir. Quiero volver a batir el récord del mundo», comenta entusiasmada.

Además del récord de triple salto, que ya lo tiene en sus manos, la atleta valenciana se marca ahora el objetivo de batir un récord: el de longitud. En categoría master W45 (de 45 a 49 años) Eva Gadea ya posee el récord del España de longitud (5,57) y el de master W50 (de 50 a 54 años) está en 5,40. «Este va a caer…«, comenta Eva entre risas. De hecho, explica que «en longitud hice salto nulo, pero hubiera sido también récord del mundo».

Eva Gadea: «Quiero volver a batir el récord del mundo»

Todos los resultados conseguidos requieren un esfuerzos. Y la deportista de València busca huecos en el día para poder entrenar compatibilizando su trabajo con el resto de actividades. Desde hace 28 años ejerce como profesora de Educación Física en el Colegio Jesús-María de València. «Martes y miércoles solo tengo dos horas libres al mediodía y una de las dos la dedico a entrenar. Aunque llueva, haga calor… da igual. Es una norma que yo ya tenía cuando era joven. No hay excusa. De joven entrenaba hasta cuatro horas al día. Ahora solo una y a veces menos», explica.

Una carrera en dos capítulos

La carrera de Eva Gadea está dividida en dos capítulos. El primero, hasta los 25 años; y el segundo, desde los 42 años hasta la actualidad. En su primera etapa decidió dejar de competir «con la intención de no volver, de hacer otra vida. Porque llegué a un punto que el desgaste y la presión de la competición y los entrenamiento es muy fuerte», explica. Aunque durante ese tiempo «quieras o no, nunca lo he dejado del todo”, añade haciendo referencia a su trabajo.

En este punto, la atleta valenciana reflexiona sobre cómo ha cambiado la actividad deportiva: «Antes un atleta de élite terminaba a los 25 años de competir al máximo nivel, pero ahora no. Ahora hay mucha gente que ya no para y enlaza con la competición en categorías Máster». Eva decidió poner punto y final a su carrera. Pero realmente fue un punto y seguido.

Eva Gadea: «Tuve anemia por el estrés del cambio de vida»

«A los 42 años el Catarroja me llamó. Fueron los primeros que hicieron el primer equipo femenino máster de España. Y así, en 2015 volví para hacer un favor», explica. Y no fue fácil competir en ese momento porque las lesiones acechaban: «me lesionaba bastante. No es correr y ya está, sino que los saltos también son muy agresivos. Aun así, fui al Campeonato del Mundo en Lyon en 2015 y quedé séptima. Acabé coja».

Eva en el subcampeonato del mundo logrado en Polonia en 2019

Después, Eva quedó tercera en el Campeonato de Europa en Italia. Justo después llegó un momento difícil para ella. «Tuve anemia del estrés del cambio de vida. De hacer una vida normal a tener una vida de competición, de entrenamientos». Todo cambió en 2019 cuando logró el subcampeonato del mundo en triple salto y en longitud en Polonia.

Ahora Eva persigue también las plusmarcas de longitud y 60 metros vallas. No quiere dejar de superarse. Al final, está aprovechando los años infinitos de juventud. 

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