Israel Molina Gómez
La extremeña se enamoró de su deporte casi por casualidad, pero desde ese momento no ha dejado de crecer hasta llegar al punto de haberse convertido en una pionera. Ahora va a hacer historia siendo la primera mujer que va a debutar en unos Juegos y tiene claro que lo más importante es "disfrutar", aunque le gustaría "meterse en la final"
La historia de amor de la piragüista adaptada Inés Felipe y el piragüismo nació casi por casualidad. Un día, llamó su atención un palista que estaba entrenando en Badajo y tras ese descubrimiento arrancó un camino cuya primera meta llega en Tokio, en esos Juegos Olímpicos donde se convertirá en la primera piragüista española en debutar en unos Juegos Paralímpicos.
«Mi principal objetivo allí será entrar en la final», comienza diciendo sobre sus aspiraciones en esa cita en la capital nipona que tendrá lugar en apenas dos meses. «Aunque lo más importante de todo y lo principal es disfrutar de la experiencia», se recuerda a sí misma.
A esta deportista extremeña se la puede tachar de pionera, puesto que va a hacer algo que nadie ha hecho antes.
«Es un honor para mí desempeñar ese papel en el piragüismo femenino paralímpico. Espero representarlo de la mejor manera posible»
Está convencida de sus posibilidad puesto que su trabajo y esfuerzo está siendo constante para llegar en el mejor momento de forma posible a Tokio, donde confía en poder demostrar todo su potencial.
Pionera del piragüismo
Aunque ella será la primera mujer en lograr este hito, el piragüismo adaptado ya tuvo un representante en Río 2016 y ahora llegan muchos más, algo que demuestra el tremendo crecimiento que este deporte ha experimentado dentro de nuestras fronteras.
«España va a pasar de tener un palista en Río a tener cinco (cuatro hombres y una mujer) en Tokio. Es bruto del buen trabajo que se está haciendo tanto por parte de los deportistas como de la Real Federación Española de Piragüismo»
Deportista del Club de Piragüismo de Badajoz, Inés Felipe recuerda que se enamoró de este deporte paseando por los puentes de esta ciudad extremeña y también destaca que no hay una gran diferencia entre el trabajo y el entrenamiento que hacen los palistas con y sin discapacidad, más allá del hándicap que supone para estos últimos el no poder hacer fuerza con las piernas o realizar lo que denominan como «pedaleo», explica a Radio Televisión Española.
Volviendo al presente, todo el mundo es consciente de que la pandemia no ha terminado y el Covid-19 sigue instalado en nuestras vidas, algo que también tienen claro unos deportistas que sabrán que los Juegos serán diferentes a lo habitual. Eso sí, mantienen cierta calma debido a las informaciones que reciben tanto del Comité Organizador o desde los propios Comité Olímpico Español y Comité Paralímpico Español. «Es algo que nos tranquiliza bastante», destaca.
Contrarreloj a los Juegos de Tokio
«Nos consuela saber que los Juegos siguen en pie«, cuenta al tiempo que explica la sensación de que hay una parte de la población japonesa que está en contra. «Confío que allí estará todo bastante controlado».
Por otro lado, en cuanto a sus planes próximos antes de viajar a Tokio, cuenta que la selección española de piragüismo se concentrará «en burbuja» en Sevilla durante catorce días, evitando todos los riesgos posibles antes de coger el avión y cruzar el charco. La idea, según explica, es llegar a Japón apenas cinco días antes de que sea la competición y después tienen previsto regresar nada más acabar. «Todo muy rápido«, acaba diciendo entre risas, sabedora de que será una competición especial, la más importante, pero que será muy diferente a lo que siempre han sido unos Juegos.
Fotos: Instagram Inés Felipe.
