Vicente Boix
El ultrafondista valenciano cierra su participación en la Bygholm So Ultra 2019 y transforma así sus minutos de competición en 207 kilos de alimentos solidarios
El ultrafondista valenciano Iván Penalba ha conquistado Dinamarca. Reconocido a nivel mundial por sus números de récord y, sobre todo, por su compromiso con las personas más necesitadas, el joven natural de Alfafar ha puesto así el broche de oro a su participación en la Bygholm So Ultra 2019, transformado una vez finalice el mes de febrero sus minutos de competición (207′) en 207 kilos de alimentos solidarios.
El trayecto, como reconocía a este medio de forma exclusiva, “ha sido uno de los más bonitos que he visto en mi vida”. Para completarlo recorrió de forma gradual una carretera –helada y nevada– de 7,45 kilómetros que rodeaba el Lago Bygholm, el más emblemático de la ciudad, hasta completar el total de 52,150 kilómetros que componían la prueba organizada por Per y Jane, las personas que le acogieron en su casa.
De este modo, con temperaturas bajo cero, Iván Penalba salió liderando la edición y así la terminó, manteniendo un ritmo constante que –pese a la gran cantidad de subidas y bajadas– le llevó a proclamarse campeón y lograr el récord absoluto del circuito. Eso sí, destacando desde al recorrer las siete vueltas de la prueba con poco más de 550 metros de desnivel en 3 horas y 27 minutos, un ritmo de 3’ 58’’.
Así se mostraba el joven deportista una vez llegaba al final de la Bygholm So Ultra 2019: “Ha sido realmente emocionante correr en este ambiente y país tan bello. La gente se ha volcado conmigo, y me ha hecho sentir como en casa. Además, la prueba me sirve para seguir con la preparación de los objetivos que se vienen este año, así que no puedo estar más feliz”.
Por ello, con su consecuente vuelta a casa, Penalba destaca que ha logrado hacer de esta experiencia una nueva acción solidaria, porque transformará una vez finalice el mes sus minutos de competición (207′) en 207 kilos de alimentos solidarios, una acción que le caracteriza desde años atrás. Porque éste es el verdadero espíritu del deporte, y la andadura del ultrafondista valenciano es, como poco, admirable.
