La importancia de afrontar una lesión de rodilla con positividad | Yo soy noticia

No hay articulación más machacada para el deportista de alto nivel que la rodilla. Son innumerables los casos en los que vemos lesiones gravímas que terminan en meses y meses de recuperación. Es el caso de Jordi Jorba (Barcelona, 8 de mayo de 1997), internacional con la selección española de rugby, y alguien que tiene una amplia experiencia en este tipo de problemas. Está volviendo de una y ya lo vivió otra vez anteriormente.

«Han pasado ya cuatro meses y medio», cuenta sobre aquel fatídico España – Georgia del 9 de febrero que, además, terminó en derrota de Los Leones. «Mira, era un partido que todos estábamos esperando y no pudo empezar peor», explica sobre esa lesión que se produjo apenas un par de minutos después de que arrancara el encuentro.

«A nivel de flexión y extensión podría decir que estoy más en forma si cabe que en lo que respecta a la otra pierna. No he tenido opción de estar con los mejores fisioterapeutas, pero aún así, ya tuve experiencia con la otra pierna, así que he empleado todos mis conocimientos para completar una recuperación espléndida»

Y es que, según él mismo relata, su evolución es muy favorable. «Ahora mismo estoy en la fase de musculación y pronto empezaré con la técnica de carrera. Dentro de un mes ya estaré corriendo. Espero estar recuperado del todo para empezar la temporada en septiembre u octubre».

«Lo bueno está por llegar»

Además, si de algo está seguro y convencido es de que volverá «mucho mejor que antes». Piensa sobre esto y recuerda aquella primera lesión que tanto le ha enseñado a la hora de afrontar esta segunda. «Tras mi primera lesión grave me dije lo mismo y terminé haciendo una muy buena temporada. Lo bueno está por llegar», cuenta uno de los grandes del rugby nacional, uno de esos jugadores que llevan ligados a la selección desde las categorías inferiores.

Pese a la cuarentena, el Estado de Alarma y la lesión, Jorba reconoce haber seguido ligado al núcleo del combinado nacional a través de la tecnología tan propia de nuestros días. «Hemos hecho alguna videollamada con todo el equipo técnico de la selección y también con mi doctor».

Su mensaje es siempre este, el de la positividad, algo fundamental para superar una lesión de este tipo, tan grave y de cuya recuperación total depende la evolución de la futura carrera de los propios deportistas. «Cada vez me noto más en forma, así que lo estoy llevando muy bien. La vuelta a la normalidad no ha cambiado mucho por mi parte. De hecho, he aprovechado para completar mi rehabilitación en casa y he podido trabajar mucho».

«La clave más importante para volver al 200% la tenemos en la cabeza, el aspecto mental. En este tipo des situaciones no puedes dejar comerte por las malas sensaciones, es vital ser positivo incluso en mi situación, con ganas de volver y comerme el mundo. Esa es la principal clave para reincorporarte a pleno rendimiento».

Bromea cuando se le pregunta por lo que espera a partir de ahora en un futuro cercano…

«Como deseo personal, pediría unas rodillas de acero»

Más allá del tema de su lesión, algo que ya está próximo a superar y dejar atrás, Jordi Jorba se siente feliz porque «el panorama del rugby se va aclarando a medio plazo», ya que según él mismo confirma «se han dado por finalizadas las ligas en España y las federaciones europea y mundial trabajan para reorganizar los partidos y los torneos pendientes que afectan a nuestras selecciones».

Un nuevo rugby

Por otro lado, la Federación Internacional de Rugby ya se ha puesto manos a la obra para tratar de que el rugby puede recuperar sus constantes vitales cuanto antes. «Estoy más o menos al día de todo lo que va ocurriendo. Es verdad que ha habido tiempo para desconectar, pero me gusta seguir la actualidad de mi deporte», describe.

Sin embargo, está a favor de todo lo que está haciendo World Rugby. «Es fundamental todas estas medidas, especialmente de cara a la seguridad de los jugadores». Por todo eso, está deseando que su regreso al oval y a la competición sea lo mejor para todos.

«Me imagino mi vuelta con los Leones en un estadio a reventar, lleno hasta la bandera, libre de coronavirus y con muchos nervios encima».

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