Su nombre es Alin Florín, tiene 21 años y desde los 16 se dedica al boxeo. En sus inicios en el Club Shaolin de Xirivella ya dejaba destellos de su talento, ambición y potencial físico. En el terreno amateur sus combates se contaban por victorias por KO y tras su paso a profesional, sus cualidades se han multiplicado.
El próximo 22 de septiembre Florín se medirá a Franklin Varela, experimentado boxeador venezolano que ha combatido contra estrellas mundiales de este deporte. Sin duda, una prueba de fuego para el xirivellense en una pelea entre dos «tigres» del boxeo.
¿Miedo? ¿Presión? Lejos de ello, el valenciano tiene ganas de triunfar y hacer historia aprovechando este combate ante un rival reputado.
Para que nuestros lectores conozcan qué tipo de boxeador eres, ¿cuáles dirías que son tus características?
Tal y como se puede ver en mis vídeos, mis características son la pegada, la fuerza, la velocidad y algo de técnica.
¿Es cierto que tus combates se cuentan por victorias?
Sí, antes del límite gano mis combates. La última pelea, de hecho, la acabé en el primer asalto. Mi rival duró dos minutos. En el penúltimo, a mi contrincante le hice KO en el segundo asalto.
¿Te ha ocurrido eso a ti al revés?
No, nunca me han tumbado ni me han hecho cuenta. En cinco años que llevo boxeando he mejorado mucho.
¿Cuánto tiempo llevas boxeando?
Cinco años. Tengo 21 y empecé con 16 en el Club Shaolin de Xirivella.
¿Por qué comenzaste a boxear?
Porque me llamó siempre la atención. Quería hacerlo con 14 años pero al ser tan joven no me dejaron así que me puse a jugar a fútbol y dos años después comencé en el boxeo.
¿Desde el principio se veía tu talento?
Sí. La gente más mayor que tenía experiencia en el gimnasio me decía que yo era muy rápido y tenía mucho corazón, que no me daba miedo nada, que siempre tiraba con todo y tenía mucho fondo.
¿Has notado un gran cambio al pasar de Amateur a Profesional?
Sí, me noto más fuerte cuando pego. Cambia el vendaje y los guantes. Ahora me siento más libre y más ligero.
¿Crees que ha llegado el momento de dar un gran salto en tu carrera?
Sí.
«Quiero llegar a lo máximo, aún soy joven y mi deseo es llegar a lo más alto. Soñar es gratis y yo sueño con llegar lo más lejos posible»
¿En qué piensas cuando hablas de “lo más lejos posible”?
Cuando me voy a dormir me digo: “Ojalá llegue lejos y un día sea campeón del Mundo”.
Son palabras mayores.
Nada es imposible si te lo propones. En mi cabeza está convertirme en eso porque no le tengo miedo a nada y lo que me propongo siempre lo consigo. Me propuse con 20 años dar el paso a profesional y lo he conseguido.
«Tengo mucha hambre de victoria y muchas ganas de pelear. Estoy evolucionando cada combate. Me siento con más ganas y más fuerte, con más actitud y más coordinación. Estoy creciendo brutalmente»
¿Sientes la presión por el momento tan importante en el que te encuentras?
No. Lo único de que tengo ganas es de llegar ahí. No siento presión ni miedo.
El próximo 22 de septiembre tienes un combate muy exigente ante Franklin Varela, boxeador experimentado que se ha enfrentado a campeones del mundo y estrellas del boxeo. ¿Cómo afrontas esa pelea?
Hasta ahora es el combate donde más difícil me lo van a poner. Lo que ocurre es que a mí me gusta eso, me encantan los retos. Cuanto más difícil mejor porque entreno con más ganas. A mí me entristece que en una velada me toque pelear de los últimos porque mucha gente se marcha a casa. Yo quiero que la gente venga al enfrentamiento con Franklin Varela porque les garantizo que el espectáculo está garantizado porque tengo muchas ganas.
¿Qué crees que va a ocurrir?
«Es un rival exigente pero yo siempre digo lo mismo: mis rivales necesitan suerte porque yo no la necesito. Mi apuesta es que va a caer en el tercer asalto por KO. Muchos campeones no lo han conseguido pero nada es imposible»
De hecho, recientemente he peleado con un contrincante inglés que también tenía mucha experiencia y se había enfrentado a grandes rivales a nivel internacional. Cuando terminamos el combate él me dijo: “No he peleado con ninguna persona que me haya pegado tan fuerte como tú”. Además, él declaró públicamente que o bien tenía una costilla rota o fisurada. Ya veremos cómo aguanta Varela porque yo confío mucho en mí.
Entonces, ¿firmarías una victoria por puntos?
Es cierto que es un rival muy duro, el más grande contra el que he peleado hasta ahora. Pero a mí no me gusta firmar lo fácil. Quizás lleguemos a los puntos aunque yo espero que no. Siempre quiero acabar antes del límite.
Te iba a desear suerte pero veo que no la necesitas
No. Yo confío en mí y cuento con el apoyo de la gente. Cuando el público está conmigo no hay cansancio, no hay dolor ni hay nada. Solo hay ganas de pelear.
¿El público disfruta mucho contigo?
Eso se tiene que ver desde fuera pero desde dentro, ¿sabes qué sensación es esa?
«Ni te imaginas lo que es sentir cómo la gente te anima a muerte, te gritan… Es como si me dieran un tercer pulmón. Es como vivir un sueño. Es algo indescriptible»
¿Te ha ocurrido en algún combate, donde estabas contra las cuerdas, que el aliento del público te ha permitido revertir la situación?
No, creo que nunca me ha pasado eso pero espero que nunca lleguemos a ese extremo.
No siempre se podrá ganar.
No, siempre se puede ganar. Mi rival también tiene dos manos y dos piernas como yo. ¿Qué tiene mejor un campeón del mundo conmigo? La diferencia es que uno está mejor preparado que otro pero si uno se estudia al rival y pone actitud y empeño siempre se gana. He renunciado al trabajo para centrarme al 100% en el boxeo. Me dedico a ello íntegramente y cuento con el apoyo de mi familia, mi novia y mis amigos.