editor-ysn
María se desplaza casi a diario desde Tavernes de la Valldigna hasta el CD KazokuSport, para entrenar en manos del campeón del mundo Pepe Carbonell
Sanfrancisco comenzó probando multitud de deportes como el ballet, el tenis, la natación, e incluso el flamenco, pero ninguno le ataba.
Un día llegaron las artes marciales para quedarse, y con tan solo cuatro años se adentró en el mundo del karate: “Era mi manera de desahogarme, de evadirme. Sentía que cambiaba de planeta.”
«El CD KazokuSport es como mi segunda familia»
Comenzó en el club de Tavernes de la Valldigna, pero a los 7 años se estancó en éste y dejó de evolucionar, por lo que decidió irse al CD KazokuSport.
Allí enseguida entró bajo la tutela de José Carbonell, el gran maestro de todos los que allí entrenan, y de su hijo y todo un referente en el karate como es el campeón del mundo Pepe Carbonell: “Me siento muy acogida, es como mi segunda familia.”
Pero no se puede competir con los Carbonell como entrenadores, y pasar desapercibido: “Voy a los campeonatos y veo como los niños le piden autógrafos, y me parece raro porque yo estoy acostumbrada a estar con él, para mí Pepe es como un amigo.”
Campeona de España Juvenil
Pepe es quien consiguió que María se adentrara en el karate de una manera más profesional: “Me entrenó a tan solo dos meses de ir al Campeonato de España, y quedé tercera. Este fue el momento en el que me dí cuenta de que valía para el karate», nos cuenta la joven promesa.
José Carbonell, el padre de Pepe, también pone su granito de arena en los entrenamientos de María, y es que cuando su hijo está de viaje, le toca a él tomar el relevo. Otro gran profesional, con el que la joven karateka disfruta y aprende mucho de sus años de experiencia.
«El año pasado me llevé una gran desilusión, porque llegué a la final en Murcia y me eliminaron»
Hace dos semanas, María se hizo con la victoria en el Campeonato de España Juvenil, una meta por la que llevaba luchando mucho tiempo: “El año pasado me lleve una gran desilusión, porque llegué a la final en Murcia y me eliminaron. Estuve todo el año entrenando para, finalmente, no lograrlo. Así que decidí volverlo a intentar.”
Y no solo lo intentó, porque la doble campeona nacional y tercera individual se colgó el oro en kata con tan solo 13 años.
Más que mérito
Una sensación “increíble” y de plena satisfacción para María, ya que su victoria tiene mucho más mérito. La vallera se traslada tres días a la semana hasta Valencia para entrenar con Carbonell, lo que supone un gran esfuerzo tanto económico como de tiempo.
Mis padres son mi mayor apoyo, trabajan mucho y sé que hacen un gran sacrificio para conseguir tiempo para mí y para mi sueño.”
Sanfrancisco continúa con sus estudios y le gustaría cursar Medicina en un futuro, pero con el ritmo de vida tan acelerado que lleva no sabe si podrá compaginarlo con el deporte: “De momento voy encontrando ratos para los libros, hasta estudio en el coche de camino al entrenamiento. Me va bien, pero más adelante estoy segura de que será más complicado así que ya veremos.”
«Si quiero vivir del karate me tengo que replantear ciertas cosas»
Entre los ratitos en el coche y alguna tarde que le queda libre, María se está formando en segundo de la ESO con muy buenos resultados.
Pero si continúa avanzando en el karate y en sus estudios, quizás llegue un momento en el que le toque decidir: “Es lo que me dicen mis padres, si quiero vivir del karate me tengo que replantear ciertas cosas.”
Un futuro junto al karate
La valenciana tampoco descarta montarse un gimnasio como su entrenador, y así poder disfrutar cada día de su pasión durante el resto de su vida. Poco a poco iremos viendo el camino que toma María, de momento su mayor sueño y objetivo a largo plazo es llegar a las Olimpiadas de Tokio.
Pero antes tiene que continuar subiendo escalones y logrando tan buenos resultados como hasta ahora. El 19 de abril viajará a Madrid para participar en la preselección del Campeonato del Mundo para pasar a Cadete.
Este año es el último en Juvenil para la vallera, el próximo será la más pequeña en la categoría: “Quedar campeona de España será muy difícil, pero yo lo quiero conseguir.”
María es puro talento, constante sacrificio e e ilusión por un sueño. Y con apoyos diario como el de los Carbonell, seguro que conseguirá todo lo que se proponga.
Sabe que el camino no será fácil, que tendrá que esforzarse cada vez más y sacrificar ciertas cosas por perseguir los éxitos en el karate, pero los alcanzará y la veremos, por lo menos, al nivel de su entrenador. Y es que dicen que al final el alumno supera al maestro, ¿no?
