Vicente Boix
El mundo del motor despide en palabras del piloto valenciano Vicente Pérez a Andreas Pérez, el joven que falleció el pasado lunes
El mundo del motociclismo mundial despide entre lágrimas a Andreas Pérez, el piloto de 14 años que falleció este pasado lunes 12 de junio al no poder superar la gravedad de las lesiones cerebrales sufridas en el FIM CEV de Montmeló. El joven de Mollet del Vallés, pese a ser evacuado al instante en helicóptero «con el corazón latiendo», perdió la vida momentos después en el Hospital Sant Pau de Barcelona.
Nada pudo evitarlo. Ni el incesante trabajo de los médicos y ni siquiera los apoyos del público desde la distancia. El caída sufrida en la curva 5 y, sobre todo, la gran cercanía con varios pilotos que llegaron desde atrás propició una de las mayores tragedias deportivas. «No hemos podido esquivarle», destacaban entre lágrimas y preocupación los pilotos afectados en el choque.
No pudimos esquivarle, pese a nuestro intento”, explican los pilotos implicados en el accidente
También el piloto valenciano Vicente Pérez, que vivió la situación de manera muy cercana como amigo y compañero de equipo con Reale Avintia: «Ha sido el golpe más duro de mi vida. Recuerdo lo ocurrido con Simoncelli, pero esto me dejó en shock. Escuché el ruido del helicóptero, pero nunca fui consciente de lo ocurrido en carretera».
Por ello, con su entrada al paddock, ante el aviso de bandera roja, experimentó lo ocurrido en boca de su equipo. «Cuando bajé de la moto, Andreas ya no estaba en el circuito. Pregunté por él, por la trascendencia de todo esto, y me vine abajo. Nunca pensé que esto pudiera llegar a de una forma tan próxima a nosotros», reconoce el piloto de Cullera.
Cuando llegué al paddock, Andreas ya no estaba en el circuito. Me enteré después”, rememora
Menos aún, como insiste, que el fallecimiento de Andreas derivara en un conflicto mediático sobre la capacidad de la juventud a lo mandos de una moto: «Vivimos, crecemos y disfrutamos sobre ellas desde los 5 años, alzando así un control y un aprendizaje impropio en gente aficionada al mundo del motociclismo amateur, pero nadie está libre de sufrir un accidente».
Hace, por ello, una comparación personal respecto a los jóvenes que dan ruedos con su ciclomotor por las calles de las localidades. «La gente, según lo que observo esta semana, aprueba más el comportamiento del resto de jóvenes que el nuestro, que competimos en circuitos cerrados y sin peligro externo de otros vehículos de la ciudad», apostilla.
La gente parece que aprueba más el comportamiento del resto de jóvenes que el de los pilotos profesionales”, detalla
Mientras, ensalza el reto que afronta este fin de semana al volver a competir en el mismo circuito; en la fatídica curva 5. «Tengo muchas ganas de que termine el fin de semana, porque las emociones son muy recientes y el dolor está presente. Aún no lo hemos asimilado, al menos yo. Esto es muy duro, y no sé cómo reaccionaré cuando pise la zona», destaca el valenciano.
Es lo que invade su cabeza constantemente. Sin pestañear. De esta forma, a falta de poco más de 2 días para vivir el pequeño homenaje que se le realizará –según lo previsto– al joven piloto catalán, Vicente Pérez agradece los años compartidos junto a Andreas y pronuncia, ahora sí, el último adiós en nombre del gran mundo del motociclismo.
