Vicente Boix
El joven piloto valenciano de tan solo 12 años está a las puertas de ser uno de los únicos pilotos en ser seleccionados para competir en la prestigiosa Red Bull Rookies Cup
El mundo del motociclismo -sobre todo en la zona de la Comunitat- está teniendo una evolución imparable, prácticamente ya imposible de categorizar. Con más de cinco pilotos en las categorías de Moto2 y Moto3, la joven figura de Marcos Ruda, de tan solo 12 años, está a las puertas de pisar las alfombras rojas del Mundial de Motociclismo, partiendo ahora desde la Red Bull Rookies Cup.
Es su objetivo inmediato, aquello que podría darle el pase directo a las escuderías de primer nivel. Pero -antes de cantar victoria- debe superar la fase de selección, que le dará el acceso definitivo a la competición. «Necesitamos que toda la gente se movilice y, votando desde las redes sociales, ayude a Marcos a lograr el chaleco de oro. Es un paso crucial», argumenta el padre del piloto.
Lleva insistiendo en la importancia de la Red Bull Rookies Cup desde hace meses, ya que es consciente de la oportunidad que representaría para los jóvenes pilotos una gran actuación. Desde una hipotética victoria hasta un gran resultado final, pasando por una posible llegada al Mundial. Por ello, ha concienciado a su hijo y a la gente del equipo para sellar la participación en la próxima temporada.
Abordaje de pilotos valencianos
Ruda se convertiría de esta forma en el segundo piloto valenciano, junto a Carlos Tatay -joven natural de Alaquàs que está disputando este curso la competición-, en competir en la Red Bull Rookies. Eso sí, antes deberá hacerse un hueco entre los más de 200 deportistas mundiales que optan a la selección definitiva y luchar ya después por ser uno de los mejores.
Hasta entonces, Marcos Ruda sigue entrenando de sol a sol para llegar a todos los próximos retos de la nueva temporada con el mayor nivel. «Tenemos que fijarnos objetivos de gran dificultad. Sin ellos, resulta imposible encontrar la motivación necesaria para para llegar a lo más alto. Vamos paso a paso, pero sin parar ni un solo segundo», explica el joven piloto.
La oportunidad internacional
Además, hace especial hincapié en la ilusión que tiene por ser seleccionado entre la infinidad de deportistas para la Red Bull Rookies Cup: «Después de competir en PreMoto3 y ser campeones de España de Moto4, teníamos la mente fijada en esto. Luchar contra pilotos internacionales nos ayudará a mejorar y, sobre todo, a conocer diferentes circuitos mundiales».
Así pues, con todo preparado para entrar en la lista de los «elegidos», Marcos ya piensa en futuro, en ese momento especial que le lleve a competir ante los mejores pilotos del mundo. Será, de este modo, el principio de una historia, la de un joven deportista que aspira a ser el próximo aspirante al trono del Mundial. Este es el ya mayor Marcos Ruda.
