Pepe Arnau: la seña nacional de la montaña valenciana | Yo soy noticia

José Vicente Arnau, «Pepe» para los videomarcadores y compañeros de batallas, se cala las gafas negras y el mono rojiblanco mientras el sol cae a plomo sobre el capot de su Fórmula. Le encanta. Es su vida desde la infancia. Por ello, habla con sosiego de la experiencia y el dominio del volante, aunque reconoce que el camino hasta lograr adjudicarse una infinidad de subidas de montaña por toda España no ha sido fácil.

Todo lo contrario. Insiste desde los primeros minutos de charla en el trabajo y la constante predisposición a mejorar como piloto y deportista. De hecho, a sus 68 años, sigue disfrutando y aprendiendo. «El mundo del motor te sorprende todos los días. Siempre hay alguna novedad, un detalle que pulir, sobre todo si llegas a convertirlo en tu mayor afición», explica Arnau.

Eso sí, no sin antes echar mano de las fotos y las publicaciones en prensa impresa que evocan la nostalgia de su inicio: «Por aquel entonces era un chavalín. Empecé con los karts hasta dar el salto al grupo 1. Aún así, opté por cambiar de categoría poco después, ya que había una infinidad de coches trucados; impermisibles para la rivalidad de la clase».

Abandoné el grupo 1 porque había una infinidad de coches trucados», argumenta Pepe Arnau

También «una inoperancia incomprensible por parte de los organizadores», que aumentó más si cabe la ventaja de los pilotos respecto al resto, además de forzar el cambio de Pepe Arnau a la Fórmula Libre. Desde entonces, logró vencer en la mayoría de sus participaciones, adjudicándose un total de 18 Campeonatos de la Comunitat de Rally de Montaña y otro buen puñado en los de Murcia.

Todo ello le llevó a salir de su ciudad natal y comenzar a codearse con los mejores pilotos de España. «Sentí que mi paso por el rally valenciano había alcanzado su fin. Los rivales, los circuitos, el ambiente, los títulos. Todo era monótono, por lo que me aventuré a disfrutar de la competición por los mejores montes de España y junto a grandes deportistas», afirma.

El rally valenciano era muy monótono para mí, por lo que me lancé a las competiciones nacionales», rememora

Mientras, hace valer su condición de mecánico. Fue y sigue siendo lo que le abrió las puertas de los monoplazas y lo que le ha permitido consagrarse como la seña nacional del rally valenciano, porque «apenas he recibido ayuda publicitaria o de otros sectores». Es más, recalca una y otra vez, sin fin, su cargo de preparador y conductor de los Fórmulas.

Es lo que le hace uno de los mejores pilotos históricos de la zona. También padre, ya que compagina sus obligaciones laborales y deportivas con el aprendizaje de su hijo Saúl sobre los rallyes. «Está creciendo muy rápido. De hecho, cada vez son más las personas que aplauden sus resultados y siguen sus trazadas. Parece que me ha cogido el testigo», comenta de forma picaresca.

Mi hijo Saúl está aprendiendo muy rápido. De hecho, cada vez son más las personas que aplauden sus resultados», afirma Pepe Arnau

Así pues, tras más de 36 años ligado profesionalmente a los rallyes de montaña, Pepe Arnau sueña con seguir manteniendo el nivel de sus registros históricos y, sobre todo, con instruir a su hijo Saúl, que está a las puertas de unas temporadas cruciales en su carrera deportiva. Un mito que, pese a su vigencia a los volantes, ya empieza a ceder su reinado.

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