Sergio Gea
Tras casi 20 años compitiendo el de la Vall d'Uixó logró llegar por primera vez a la final y ganar el Campeonato de España de Caza Menor con Perro. "De pequeño le dije a mi padre: un día seré campeón", comenta
Casi 20 años llevaba intentando Enrique Martín coronarse como campeón de España de Caza Menor con perro. Una modalidad complicada en la que para tan solo llegar a la final debes pasar diversas rondas a nivel autonómico y nacional. El cazador de la Vall d’Uixó consiguió así un logro que dedicó a su padre, que le inculcó la afición por la caza de pequeño y que ahora le sigue atentamente desde el cielo.
El valenciano Enrique Martín se proclama campeón de España de Caza Menor con Perro 2022
Enrique explica que es la primera vez que llega a la final. «Y encima gano», apunta. Y para llegar hasta la final a nivel nacional «se empieza en el pueblo a nivel local. Yo me presento con la Sociedad de Cazadores de Sagunto, ya que vivo aquí. Una vez pasamos al comarcal se clasifican unos 20. Y más tarde se llega al provincial. Van cuatro de cada provincia de la Comunitat Valenciana más el último campeón».
Una vez superadas estas dos primeras rondas «pasan 5 o 6 a las semifinales, que se dividen en dos zonas: norte y sur». En este caso la Comunitat está encuadrada en la zona sur y hay 54 escopetas entre las dos zonas.
Por tanto, la final la componen 28 participantes. Explica el castellonense que «el objetivo siempre ha sido llegar a la final. Solo en los comarcales se presentan 200 escopetas y quedan 24 al final. Hay una criba muy grande y es difícil pasar porque hay mucho nivel. Hasta ahora he hecho cinco autonómicos y solo uno a la semifinal este año. Quedé el noveno pero con la misma puntuación que el tercero».
Primer castellonense en ganar y quinto de la Comunitat Valenciana
La consecución del Campeonato de España de Enrique Martín supone además, un hecho histórico más: es el primer cazador de la provincia de Castellón en ganar el Campeonato de España de Caza Menor con Perro que este año celebraba su 53º edición.
También, en consecuencia, es el quinto cazador de la Comunitat Valenciana que lo logra. Antes ganaron en el año 1993 en el coto de Corral de Almaguer D, Antonio Cloquel, de Alicante; en 2005 en el coto el Corralejo ganó D. Vicente Silvestre, de Valencia; en 2011 en Daroca ganó D. Francisco Mateos, de Valencia; y en 2017 en el Valle de la Serena ganó D. Alfredo Terol, también de Valencia.
«El sacrificio que he hecho para estar bien físicamente y psicológicamente es muy grande»
La victoria ha sido el mejor premio al esfuerzo diario de Enrique. «Yo soy fontanero y en los huecos que tengo diarios aprovecho para coger la bicicleta. El sacrificio que he hecho para estar bien físicamente y psicológicamente es muy grande. He perdido muchas horas de estar con mi familia y de trabajo por prepararme. Antes, de más joven, era todo corazón cuando competía. Corría como un pollo sin cabeza. Ahora corro con más conocimiento«.
Sin duda, esa ha sido una de las claves. Y, la otra, el entrenamiento: «Entreno todos los días, pero tengo un problema en la rodilla y cuando llevo un rato corriendo se me inflama el tendón y ya no puedo correr. Pero hago mucha bicicleta: cinco o seis días a la semana».
El sueño cumplido de ser campeón
La caza está presente en el día a día del castellonense. Y es una afirmación literal: «Llevo entrenando todos los días del año, también en verano, para prepararme para competir». Y el hecho de poder cumplir un sueño era la motivación diaria: «Esto es lo que he soñado yo de pequeñito. Mi padre era cazador y veíamos en La 2 el programa de caza los viernes por la tarde. Y le decía a mi padre: yo un día seré campeón«. Y añade: «Mi padre me acompañaba a todos los campeonatos, aunque él cazaba pero no competía».
Enrique también estuvo acompañado por familia y amigos: «Me hicieron una pancarta y vinieron conmigo. Me hicieron la pancarta por mi padre. La semifinal se la dediqué a mi padre que ha fallecido. Y una foto dándole un beso al cielo».
Y el legado posiblemente continúe, aunque todavía es pronto para saberlo: «Mi hija con 6 años tiene mucha afición también. Veremos».
