Adrián Rubio
Una plantilla profesional construida para ascender a División de Honor es lo que tocará superar en la primera eliminatoria de ascenso para los rojinegros
Finalmente Les Abelles no pudo entrar como mejor tercer clasificado de toda la División de Honor B, y será únicamente el CAU el que represente a la Comunitat Valenciana en los playoffs de ascenso a la Liga Heineken que arrancarán en las próximas semanas.
Llenos de gente joven con hambre de ganar más minutos en el equipo, los de Ricky Andrew concluyeron la liga regular en segunda posición y con derrota por 21-17 en Babarians XV Calvià, aunque su atención era inevitable que estuviera puesta en evitar lesionados y empezar a pensar en la pelea por ascender a la élite del rugby español.
Para comenzar no ha habido demasiada suerte, aunque los valencianos sabían que el camino no iba a ser nada sencillo. Aguarda el potente y ambicioso Bathco RC Santander en primera ronda, con la ida el 7 de abril en el campo del Río de Valencia y la vuelta una semana después, día 14, en tierras cántabras.
Los santanderinos han sido campeones del grupo A de la División de Honor B, con 20 victorias y 2 derrotas en una temporada donde se han fijado el firme y claro objetivo de subir a la máxima categoría. Un equipo profesional, con mucho tamaño y jugadores de diferentes nacionalidades que le otorga un potencial deportivo contra el que los integrantes del CAU tendrán que mostrar su mejor versión si quieren tener alguna opción.
Dirigidos por el neozelandés Simon Hafoka y por Luciano Marco, sus refuerzos de principio de curso fueron numerosos y algunos incluso rechazaron propuestas de División de Honor para enrolarse en segunda con los de Santander. Un proyecto potente, pero si cabe un reto más desafiante y motivador para un CAU Rugby Valencia que afronta esta fase de ascenso con los deberes hechos.
Por segundo año consecutivo desde la llegada de Ricky Andrew al club se ha conseguido alcanzar los playoffs de ascenso, sin descuidar la formación y oportunidad para los nuevos talentos que van surgiendo. Los valencianos se enorgullecen de ser un club formador que apuesta por el producto local, y con esas señas de identidad van a buscar la primera gran sorpresa del curso contra el todopoderoso Bathco Santander.
