Redacción YSN
Entrevista con Jeanina Alejandra Vinueza, jugadora formada en el CAU Rugby Valencia y que recientemente se ha proclamado campeona de la Women`s Premiership Rugby con el equipo de Saracens Womens.
Sangre ecuatoriana, y del CAU Rugby Valencia, en el reciente equipo campeón de la liga inglesa de rugby femenino. Es posible y lo ha hecho realidad Jeanina Alejandra Vinueza Loyola, jugadora de 20 años de edad que nació en Quito -14-5-1994- y que llegó a España con apenas cuatro años y medio. Siendo una ‘mocosa’, con los miedos y las dudas que rodean el cambio de hogar y encima a un país en otro continente, pero con la ‘droga’ del deporte metida en su cabeza desde bien pequeñita. Fue su pasión y sus ganas de hacer deporte la que le llevaron al CAU hace casi cinco años, encontrando una segunda familia en un entorno y en una actividad que le han catapultado hasta las prestigiosas y campeonas Saracens Womens. Volverán a oír hablar de ella, porque su historia en el rugby no ha hecho nada más que comenzar…
¿Cómo surge la pasión por el rugby, solamente habías practicado este deporte?
Desde siempre mis padres me inculcaron que debía hacer un deporte porque no solo era saludable y una buena forma de integrarme, sino también por la disciplina que te impone y los valores que te dan los deportes en general. Ya en Ecuador estuve apuntada a algo de gimnasia rítmica que bien no recuerdo, así que cuando llegué a Valencia fuimos probando diferentes deportes en el colegio como el tenis, gimnasia rítmica, etc… hasta que probé natación, empecé con cursillos y finalmente acabé apuntándome al club y compitiendo durante once años de mi vida. Sin duda nadar fue mi primer amor, lo fue todo durante ese tiempo y fue con todas sus cosas maravilloso. Por diferentes circunstancias me dejé la natación once años después y empecé a hacer Jiu-jitsu en el gimnasio a donde iba, y así estuve durante 3 años. Poco después en clase conocí a un compañero, el cuál jugaba en el CAU RUGBY VALENCIA, y un día hablando me habló sobre un nuevo proyecto de equipo femenino del club y que podría probar.
Con esa experiencia haciendo deporte, y encima luego con uno de contacto como es el jiu-jitsu, pocos miedos te entrarían al pensar en la exigencia fisica del rugby…
Siempre quise, pero no sabía cómo ni donde ni cuando, así que fue una ocasión perfecta para probar. Fui y me recibieron como en casa, desde el primer momento me encantó absolutamente todo, pero cuando jugué mi primer partido fue sin duda y en definitiva cuando me enamoré del rugby. En mi segunda temporada, jugando en un desafortunado partido, me rompí LCA y menisco de mi rodilla y tuve que parar un par de meses, con su respectiva operación y rehabilitación. Pero regresé a los campos después de ello y con más fuerzas que nunca. Durante todo este tiempo he de decir que recibí todo el apoyo de mi ‘familia’ del CAU Rugby Valencia y de mi familia, así que todo fue un poco más ameno. Y desde entonces he seguido jugando, ya casi 5 años.
¿Te planteaste alguna vez llegar lejos en el rugby, era más una afición o de verdad te lo tomabas como una oportunidad para, por ejemplo, competir en ligas tan importantes como es la inglesa?
No, la verdad. Empecé jugando por casualidad, continué porque me encantó y fui aprendiendo por ser más útil y mejor jugadora para mi equipo y por mí misma, por supuesto. Nunca me imaginé irme a otro país y encima jugar en una liga tan importante.
¿Con qué detalles, aspectos positivos, qué recuerdos te has llevado de tu paso por el CAU?
Todos. El CAU es mi familia, me han dado la mano, muchas veces los hombros y las mejores sonrisas que he podido imaginar. He conocido a gente maravillosa y me ha hecho crecer como persona y jugadora. Sin Cesar Camusso, entrenador de melé, nunca hubiera podido mejorar. Sin todos los consejos en entrenamientos, esa manera de transmitir el amor por el rugby y sentimiento de club, y charlas con José y Gonzalo Delgado, no hubiera aprendido todo lo que aprendí en mi etapa de iniciación al rugby. También quiero darle las gracias a Toni Gimeno por creer en mí, y por supuesto sin mi equipo, quien me regaló el poder mejorar durante cada partido, no hubiera sido posible nada. Y posteriormente todos los entrenadores, los cuáles fueron aportándome más conocimientos y a los que estaré eternamente agradecida.
Entonces surge la posibilidad de marcharte a Inglaterra y ¿cómo os tomáis tu familia y tú un cambio así? ¿Sólo te marchas para hacer deporte o hay otras motivaciones detrás, como aprender un nuevo idioma?
El primer motivo por el que vine fue el de aprender inglés, y pues viviendo mi tía aquí me resultó más fácil que irme a otro país completamente sola. Ya había venido aquí con anterioridad de vacaciones y siempre me encantó, y de hecho ya pensaba que algún día tendría que venir a probar aquí. Superada la enfermedad de mi madre decidí que era el momento de probar, y que mejor que utilizar el deporte como un medio de integración y más el rugby que es como una familia a la que no importa que no te conozcan o seas nueva, en el momento en el que empiezas ya eres parte de ella, quien juega me entiende. Fue muy difícil tomar la decisión, más que nada porque mi vida está en Valencia en muchos aspectos, pero después de hablarlo con mi familia CAU y mis padres, ambos me animaron para afrontar mi gran reto y decidí venirme.
Los primeros momentos en el nuevo equipo. ¿Fue todo fácil para ti o cosas como el idioma y el nivel de la competición te lo pusieron difícil al principio?
Ya me había puesto en contacto una persona maravillosa, la cuál me marcó mucho en su breve paso por el CAU y que se llama Elena. Ella hizo la carrera aquí y conocía a la mannager de Saracens, fue la que me puso en contacto y así fue todo mucho más fácil. Fue difícil al principio por el idioma más que nada, las palabras, los acentos y todo en inglés. Pero estudiando y familiarizándome con las palabras poco a poco fui mejorando aunque aún me cuesta a veces. En cuanto al nivel de competición, al principio se me hizo cuesta arriba ya que no estaba acostumbrada a jugar en una liga así, tan dura. Pero mi equipo me supo arropar muy bien, y ayudarme para cogerme rápidamente y adaptarme lo mas pronto posible a su manera de juego.
Habiendo vivido las diferencias entre el rugby en Inglaterra y en España, ¿cómo ves el nivel de rugby femenino en nuestro país, crees que éxitos como el tuyo, después de que lo difundamos, pueden ayudar a que más chicas apuesten por el rugby? Tengo entendido que la selección española femenina de rugby está en un gran momento…
Hay diferencia, pero aún así España no se queda atrás. La diferencia más significativa es la cantidad de clubes que hay y de chicas dispuestas a jugar a rugby, además de la difusión que tiene este deporte. Después, los entrenamientos, la concentración que se pone y el ritmo de juego que llevan en comparación a mi liga de Valencia no tiene nada que ver, aunque poco a poco va a mejorando. Espero y animo a las chicas para que descubran que no hay un deporte mejor que el rugby, uno que te habrá las puertas tan familiarmente en un país diferente al tuyo.
¿Cuáles son tus proyectos a corto y medio plazo, vas a seguir muchos más años en Inglaterra?
Si seguiré muchos años más no lo sé. Por ahora, sé que me voy a quedar un tiempo más pero realmente no sé hasta cuándo. Acabada la Premiership League y siendo campeonas con Saracens, ahora empieza The Cup, en el que todas las categorías jugamos juntas y puede ganar cualquiera. Aspiramos a ganar The Cup también y hacer un doblete, asi que seguimos entrenando cada semana e intentando mejorar de cara a los partidos que vienen.
¿Algo más que añadir, algún mensaje para tus dos familias?
Creo que no mucho más. Solo decir que durante todo este tiempo aquí me he sentido muy apoyada tanto por mi familia como por mi otra familia CAU, los que se han preocupado por mi escribiéndome y dándome ánimos, disfrutando conmigo de mis triunfos. Muchas gracias.
