‘El Niño’ que sueña con ser campeón del mundo | Yo soy noticia


El boxeador de origen rumano afincado en Xirivella comenzó en el boxeo con 16 años y se apuntó “para saber defenderme en la calle”. Diez años después, está compitiendo a nivel profesional, sigue quemando etapas y considera que sus máximos éxitos “están todavía por llegar”.

Alin (17-3, 7 por K.O.) no tiene prisa, llegó sin expectativas al boxeo y pronto, en su primer gimnasio shaolin le dijeron que tenía cualidades para competir. “Comenzó mi carrera como una afición pero terminó por ser mi estilo de vida. No me creía lo que pasaba, todo fue para defenderme y ahora quiero que conozcan mi talento al nivel más alto”, comenta ambicioso.

Mi objetivo es llegar lo más alto posible, quiero ser campeón del mundo de Peso Ligero

Ahora, sin embargo, no tiene techo. “Mi objetivo es llegar lo más alto posible y superarme cada vez más en mis combates”, cuenta ‘El Niño’, su alias en el mundo del boxeo que también tiene serigrafiado en su pantalón y que se originó en su primer combate como profesional.

“Debuté como profesional con veinte años. Nadie sabía cuál era mi nombre en ese momento, pero cuando acabó el combate, todos decían: ‘qué bien lucha el niño, qué buen combate, niño’, y de ahí se me quedó el apodo”, relata el boxeador de 26 años.

‘El Niño’ tendrá su revancha en marzo contra Kinsiona.

Suspendido por tener una brecha

Florín asegura que desde sus inicios ha podido evitar las lesiones gracias a su equipo de trabajo. “Las lesiones, las hemos evitado gracias a las manos y la máquina Bemer de Toni Bustos y gracias a la cámara hiperbárica de Nacho Ardid, que me acompañan desde mis inicios”, afirma.

No obstante, Florin no ha podido evitar estar suspendido por una brecha que le hicieron en su último combate. A pesar de los puntos y las curas, se ha dejado su trabajo en una fábrica “levantando mucho peso” para apostar por el boxeo. “Como he dejado el trabajo, tengo más tiempo para entrenar, entreno tres veces al día de lunes a viernes y una vez el sábado”, incide.

Alin Florin, con la brecha.

Reaparición y revancha, en marzo

Alin Florin tiene “hambre de boxeo” y cree que eso le hace “marcar la diferencia”. “No he parado de entrenar ni con los puntos, quiero que llegue ya marzo para volver al ring y devolverle lo que se merece”, relata en referencia a Levi Kinsiona, el boxeador que le propinó el golpe que le hizo la brecha y al que se volverá a enfrentar en marzo en un combate que será toda una revancha.

Tengo hambre de boxeo cada día, eso marca la diferencia

El boxeador afincado en Xirivella está suspendido durante un mes de la competición oficial por la herida de su anterior pelea pero hasta marzo no le volveremos a ver en un combate oficial. Aun así, espera paciente su vuelta. Es más maduro que nunca porque ha apostado firmemente por su sueño y psicológicamente, sabe cómo salir preparado a cada combate.

‘El Niño’, durante su combate ante Levi Kinsiona.

“El boxeo es disciplina, respeto y sacrificio. Tienes que salir al ring limpio, descansado, sereno con una meta segura para ganar a pesar de lo difícil que pueda llegar a ser tu rival”, aclara ‘El Niño’, que tiene muy claro su sueño y no va parar hasta conseguirlo: “quiero ser campeón del mundo de Peso Ligero”, finaliza.

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