Manel Juan Ghelli
Dos clubes humildes y trabajadores, azotados por la pandemia, se juegan el todo o nada por la salvación en seis encuentros que decidirán su devenir en el segundo escalón del fútbol femenino español.
Está siendo un año difícil por la situación que marca la pandemia del Covid-19 y aún más si cabe en clubes humildes de localidades pequeñas como lo son Almassora y Aldaia, dos equipos con bastantes aspectos en común. Ambos conjuntos ascendieron el año pasado de la categoría nacional tras un duro y tardío playoff, en el que consumaron el ansiado objetivo a finales de julio del año pasado.
Algo más de medio año después se encuentran en la división sur en el subgrupo de descenso, junto con los filiales de Levante y Valencia, del que caerán cuatro equipos de los nueve que componen el grupo.
Es una categoría muy difícil, no tiene nada que ver con la del año pasado”
Desafíos de la nueva liga
En palabras del director deportivo del Joventut Almassora, Víctor Pereira, “ha sido una liga extraña”, refiriéndose al formato de este año de la liga Reto Iberdrola, en la que al no haber descensos el año pasado, este curso se ha dividido en cuatro grupos en vez de los dos (norte y sur) que venía siendo habitual. Esto ofrece menos opciones al haber menos partidos y un margen más limitado. A esto hay que unirle que por esta circunstancia excepcional descienden el doble de equipos que la temporada pasada, lo que dificulta más si cabe a los recién ascendidos. “Es una categoría muy difícil, no tiene nada que ver con la del año pasado”.
Pero no todo van a ser problemas. El ascenso a Segunda ha traído consigo un cambio para bien a nivel de patrocinios. Víctor ha notado como este año las empresas les están apoyando un poco más, y hay más interés también de otras marcas por colaborar. Es un escalón solo, pero el cambio es muy grande. Precisamente el Almassora tiene un convenio desde hace tres años con el CD Castellón, con el que colaboran y usan su ropa y marca. Se está valorando la posibilidad en un futuro de fusionar los clubes de alguna forma pero, de momento, “nos dan la marca y nosotros la lucimos por España”.
El hecho de que se retransmitan por televisión los partidos (cinco por jornada, tanto del grupo norte como del sur) se ha convertido en un factor diferencial. Ese aumento de profesionalidad también lo han notado a la hora de las exigencias de la Federación a nivel sanitario y de restricciones. “No tienen nada que ver los controles y normas con las que estábamos el año pasado, está todo mucho más controlado. Es un dolor de cabeza para equipos modestos como nosotros”.
Hay muy buena relación entre nosotros”
Los dos equipos son nuevos en la categoría y han pasado por lo mismo para llegar hasta aquí, por ello nos cuenta Ximo Villegas, director general de la UD Aldaia, que han estado tanto él como Víctor muy en contacto y ayudándose entre ellos en lo que han podido. “Hay muy buena relación entre nosotros”.
Un playoff tardío y el Covid
Ximo nos habla de que se han enfrentado a muchos condicionantes durante la temporada, a los que han tenido que ir haciendo frente. Uno de ellos el Covid, como no. A pesar de que al Almassora no les ha afectado apenas de forma directa, en Aldaia han tenido que cancelar entrenamientos, jugadoras aisladas que no han podido participar, sumado a dos lesiones importantes al comienzo de la temporada. La pandemia no solo les ha afectado a nivel deportivo, en lo social llevan tiempo ya sin que les dejen abrir las puertas de su terreno de juego para acoger aficionados.
Incide Ximo en que es otro factor diferencial con respecto a otros clubes, a los que sí dejan jugar con público en sus gradas. “A estos niveles si no se puede entrar en unos sitios no se debe poder entrar en otros, imagínate que en el Camp Nou pueda entrar afición y en el Bernabéu no, o viceversa, sería injusto”.
A la hora de acercarse a la ventana de fichajes de verano para incorporar jugadoras de cara a la nueva liga, los dos equipos han tenido una dificultad añadida a los problemas económicos derivados del Covid. En un mercado pequeño como es el de la provincia de Castellón y una localidad no muy grande de Valencia como Aldaia, no es fácil encontrar posibles fichajes que pescar. “Acabas de jugar el 25 de julio y cuando sabes que vas a subir tiras a llamar a las jugadoras y están ya firmadas. Estás muy condicionado a fichar lo que queda”, afirmación en la que coinciden tanto Ximo como Víctor.
A estos niveles si no se puede entrar en unos sitios no se debe poder entrar en otros, imagínate que en el Camp Nou pueda entrar afición y en el Bernabéu no, o viceversa, sería injusto”
El salto de nivel en las rivales se ha notado y los problemas para fichar condicionaron a los equipos recién ascendidos, nos revela Ximo, que además comparte lo que para él diferencia la Reto Iberdrola con respecto a la Liga Nacional donde competían el curso pasado: “Lo más duro de la competición es que hay un plus de jugadoras que a nivel defensivo tienen mucha contundencia, y tú tienes que tener un equipo para competir con ellas”.
La recta final en la que se decidirá todo
Tanto a Almassora como a Aldaia les quedan seis partidos para cerrar el curso, tres como local y otros tres fuera, con el único objetivo de alcanzar por lo menos la quinta posición en adelante que les daría la permanencia. Para ello el conjunto castellonense deberá enfrentarse al líder, el Córdoba, el sábado 3 de abril a partir de las 17:00 horas, en el que Víctor ha catalogado como el “desplazamiento más complicado”, junto a la visita al Juan Grande de Canarias.
Es una categoría muy pareja”
Víctor espera “rascar algo” ante las cordobesas, de las que comenta que tendrían que estar en el grupo de ascenso pero tuvieron mala suerte. Y es que la liga está igualadísima, a 5 puntos tan solo del líder, y salvo excepciones no hay resultados abultados. “Es una categoría muy pareja”.
El Aldaia hará lo propio, también en tierras andaluzas, ante el Málaga el domingo 4 a las 12:00 horas en un partido clave por la permanencia. “Nos urge volver a la victoria, hay que tratar de competir, sacar los tres puntos y olvidarnos del resto. En Aldaia somos de trabajar y de olvidarnos de lo que no podemos controlar”, resalta Ximo.
Mirando al futuro Víctor siempre es de analizar las cosas en positivo e intentar luchar por metas importantes, pero el objetivo ahora no es otro que el de la permanencia para ambos proyectos del fútbol femenino de la Comunitat. “Con cualquier equipo con el que juegas aquí hay cuatro o cinco jugadoras que tienen experiencia en Primera, y luego hay alguna internacional con España. Intentar subir es complicado”.
