Israel Molina Gómez
La valenciana está pasando el confinamiento en casa, en Favara, y lo hace tras tener que dejar la Residencia Blume de Madrid de un día para otro y después de unas horas que fueron "un completo caos". Ahora se siente "bien" y está centrada en seguir entrenando y en preparar la selectividad
Aunque Gloria Fernández (Favara, València, 20/01/2001) se dedica al tiro de precisión y Fátima Gálvez al tiro al plato, no hay nada mejor para un deportista que tener un espejo en el que mirarse. «La conozco y es genial, increíble», cuenta la primera de ellas sobre una deportista que es campeona de Europa y del mundo. «Tiene una actitud espectacular y una capacidad de concentración tremenda».
Son palabras de admiración plena, por eso Gloria Fernández no deja de alagar a Gálvez, a quien vio tirar en directo en el último Mundial. «Es impactante ver cómo no cambia el gesto aunque le vayan mal las cosas, siempre se mantiene firme. Es digno de admirar», explica la joven valenciana, que vive en Madrid debido a que entrena en el Centro de Alto Rendimiento de la capital de España.
El confinamiento, «bastante bien»
Sin embargo, ella está pasando este confinamiento en Favara (Valencia), junto a su madre, y por el momento lo lleva «bastante bien» porque reconoce que normalmente tiene poco tiempo para estar en casa. «Lo estoy aprovechando y estoy disfrutando de ello, pero está claro que si se alarga pues sí sería un problema porque me empezaría a volver un poco loca, pero hasta el momento lo llevo bien, aunque para los entrenamientos sí es un problema».
Cuando piensa que ya han pasado casi tres semanas desde que llegó a su casa, recuerda el «caos» que vivió el último día en la Residencia Blume de Madrid. «Nos hicieron una reunión y el director técnico nos explicó que estaban cancelando muchas competiciones y que no se sabía que podía ocurrir. Después nos explicaron que tal vez en algún momento nos tendríamos que ir a casa», va describiendo.
«Esa misma tarde nos dijeron que al día siguiente a las 12 todo el mundo tenía que haber desalojado la Residencia. Nos volvimos todos locos buscando billetes de AVE, mirando en Blablacar… Fue tremendo»
Y es que fueron unas horas en las que se descontroló todo. «Además salió un bulo de que iban a cerrar Madrid esa misma noche… Se generó un caos tremendo. Yo tuve suerte de que una amiga estaba en Madrid con su hermano ese día, hablé con ella y me pudo recoger. Es que fue de un momento para otro».
Aunque eso ya queda lejano en el tiempo, también recuerda que primero cerraron el Pabellón de judo porque se había producido un contagio y que eso precipitó un poco las cosas. «Es normal, el virus no se iba a quedar dentro del pabellón», bromea. «Nosotros viajamos mucho, estamos en contacto con mucha gente en las competiciones».
Pero todo eso ya ha quedado en el olvido y Gloria Fernández tiene claro que lo prioritario ahora «es ser responsables, quedarse en casa y después ya se irá retomando la normalidad». Además, puede mantener sus entrenamientos de alguna forma y eso también es importante para ella.
«Hay cosas que no puedo hacer, sin embargo la parte técnica la estoy pudiendo entrenar bien, que es muy importante y a veces no le damos toda la importancia que se merece».
Su rutina diaria
Como no puede hacer «tiro real con balín o bala a diez metros», lo que hace es «tiro en seco, lo que hacía antes de entrar en la Blume». Y explica perfectamente en qué consiste. «Me pongo una pegatina en la pared y se trata de disparar y aguantar unos 25 o 30 segundos, así trabajo mucho la parada«, describe sobre una actividad que es fundamental para las tiradoras.
Además, reconoce que no nada de tiempo libre entre los entrenamientos y sus estudios de segundo de bachillerato. «Es que tengo este año la selectividad, los profesores nos están mandando más trabajo que si estuviéramos yendo a clase, así que me paso el día entrenando y estudiando. Solamente guardo un poco de tiempo para cocinar».
Sobre qué ocurrirá después de que se pueda solucionar esta crisis del coronavirus, no tiene muy claras las cosas porque no hay mucha información sobre las diferentes competiciones del calendario.
«La Federación Española de Tiro nunca sabes por dónde cogerla, supongo que nos pondrán muchas competiciones y concentraciones y nuestra entrenadora nos apretará las tuercas»
Pero eso será de aquí un tiempo y Gloria no sabe si le coincidirá con la selectividad, si será después, antes… «No quiero ni pensar en todo esto para no deprimirme», bromea la protagonista de esta historia, quien a sus 19 años es campeona de España júnior y ya ha tenido tiempo de ser finalista en un Europeo júnior, en Hungría 2018.
Una nueva categoría
Ahora, está debutando en una nueva categoría, calibre 22, y este pasado fin de semana iba a disputar su primera competición. «Estaba muy motivada, preparada y con muchas ganas, pero bueno, no pasa nada. Estoy debutando en la categoría y tengo que ir poco a poco. Hay un Mundial de mi categoría en julio este año, ese era uno de los objetivos de la temporada, pero ahora está en el aire, no sabemos nada a ciencia cierta», cuenta sobre sus planes de futuro.
Lo que sí tiene claro ya a estas alturas es que es «una afortunada» por pertenecer a un programa como el Proyecto FER. «Nos ayudan de muchas maneras, se preocupan por nosotros, te hacen sentir parte de una gran familia. Y todo eso además de la ayuda económica, que para mí es fundamental porque para ir a las competiciones hay que viajar y la Federación no se puede permitir costearnos todo eso. Es genial», va contando.
«Gracias al Proyecto FER yo he conseguido echar adelante mi carrera deportiva»
