Israel Molina Gómez
El gimnasta valenciano se acaba de proclamar campeón de España y ya piensa en sus dos próximas citas, el Mundial de Stuttgart y los Juegos de Tokio 2020
Néstor Abad (Alcoy, 29 de marzo de 1993) es uno de los mejores gimnastas españoles del momento. Ya fue olímpico en Río 2016 y ahora tiene toda la energía centrada en estar en Tokio 2020, su gran objetivo.
El año preolímpico siempre es muy importante y también muy estresante, porque te juegas la clasificación a los Juegos”, explica a Yo Soy Noticia a un año vista de esa cita.
Pero antes de eso, el deportista integrado dentro del Proyecto FER tiene por delante unos meses “con algunos campeonatos y alguna Copa del Mundo” antes del Mundial de Stuttgart (Alemania), donde espera conseguir el billete para Tokio. “Ahora hay que ir cogiendo la forma, estabilizar los ejercicios y poderlo mostrar todo en el Mundial”.
El Mundial de Stuttgart, primer objetivo
Esa primera hoja en el calendario será, por tanto, la competición germana que tendrá lugar entre el 4 y el 13 de octubre. “El objetivo aquí es el de mejorar mi gimnasia, subir en el ránking, mejorar la posición del año pasado y conseguir clasificarme para Tokio. Y en caso de llegar a los Juegos pues iré también con esa idea. Intentaré estar en la final del ‘All around’ y hacerlo lo mejor posible».
Y es que Néstor Abad, como tantos y tantos deportistas, tiene claro que los Juegos Olímpicos son la competición más importante y especial de todas en las que puede competir un gimnasta. Él ya estuvo en Río de Janeiro, en el año 2016, y tiene recuerdos “muy bonitos. Fue una experiencia genial, muy chula. Llegar hasta ahí y sentir que uno es parte de todo eso es realmente increíble”, describe emocionado el alcoyano.
“Sentirte respaldado es fundamental para cualquier deportista”
También tiene claro que para llegar a Tokio el apoyo del Proyecto FER es esencial. “Sentirte respaldado en todo momento es fundamental para cualquier deportista. Así, yo puedo invertir toda mi energía en un objetivo tan bonito como ese. Es un pilar básico para mí”.
Y es que, por otro lado, a sus 26 años Abad va a tener ahora una hija, pero es que a Río 2016 ya llegó con la paternidad recién estrenada. A pesar de su juventud, para él es un regalo. “La verdad es que lo llevo muy bien, sobre todo gracias a mi mujer, que me entiende mucho. Entiende al 100% mi proyecto, me apoya, nos entendemos bien y no discutimos nunca».
Yo paso todo el día fuera, porque me voy al gimnasio a las nueve y media de la mañana y llego pasadas las ocho de la tarde”, añade Néstor.
Otra de las cosas que ha notado Abad en este ciclo olímpico es el cambio que ha sufrido su deporte gracias, entre otras cosas, a las redes sociales. “La gimnasia ha cambiado bastante, ahora somos más visibles todo el año”.
Reconoce que hasta el momento no ha variado en nada el interés sobre él por la proximidad de los Juegos. “No he notado que ya solamente queda un año”, cierra el deportista valenciano, campeón de España, olímpico en Río y con la misma ilusión que un niño por estar en Tokio 2020 y poder dar lo mejor de sí mismo.
